SANTO CRISTO - CRÓNICA

Laza rinde culto a la primavera

Los vecinos de Laza celebraron el Santo Cristo, que  incluye el sacrificio de Abraham y su hijo, Isaac. En la fiesta desfilaron Adán y Eva, acompañados por los danzantes.

La plaza da Picota de Laza volvió a ser ayer escenario  de la tradicional fiesta del Santo Cristo, que tiene sus raíces en los antiguos ritos paganos que rendían culto a la primavera, según el alcalde, Xosé Ramón Barreal.

Los actos comenzaron a las 12,00 horas con la procesión de Adán y Eva. El papel de Eva ha de ser representado, según manda la tradición, por una joven soltera del pueblo, cuya  identidad permanece en secreto hasta que se muestra ante Adán. Este año, recayó en Silvia García.

En A Picota estaba todo preparado para la escenificación del Auto Sacramental, durante el que Abraham se dispone a sacrificar a su único hijo, Isaac. Cuando está apunto de hacerlo, un ángel baja desde lo alto para decirle: "Deténte Abraham. No mates a tu hijo. Ya veo que eres obediente con Dios. Mata en su sacrificio el cordero que tienen a tu lado". Esta representación congrega a numerosos público que ayer, al igual que en años anteriores, aplaudió el buen hacer de los actores.

Acto seguido, toda la comitiva se dirigió, junto con los danzantes, hacia la iglesia parroquial, para recibir a las imágenes de la Virgen Inmaculada y Santo Cristo y llevarlas en procesión por las calles del pueblo.

Durante este acto religioso, se exhibió el típico ramo de laurel del que cuelga una rosca y un gallo de corral. Este último es para rememorar las veces que San Pedro, según recoge la Biblia, negó conocer y ser discípulo de Cristo cuando fue crucificado. La rosca es para premiar al danzante que demuestre más fuerza, aunque este, según recoge la tradición, debe compartirla con sus compañeros. La fiesta finalizó con una batalla de moros cristianos en la misma plaza de la localidad.

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