Una jornada de convivencia reunió en Oímbra y Chaves a más de 20 religiosos llegados de 10 países
El municipio de Oímbra ha sido el escenario escogido este año por el Obispado de Ourense para la celebración del encuentro anual con los misioneros diocesanos que estos días disfrutan de unos días de descanso y reencuentros familiares en la provincia. Salesianos llegados desde Venezuela, misioneros de Etiopía, Brasil o Camerún, así como hermanos procedentes de Zambia, Roma, Estados Unidos o Angola han participado en la 36 edición de esta jornada de confraternización que pretende ser un reconocimiento a la labor que los religiosos ourensanos desarrollan por medio mundo.
La comitiva misionera, así como sus familiares y algunos ourensanos interesados en saber más de la labor en las misiones, partió a las diez de la mañana desde la Alameda ourensana. Una vez en Oímbra, participaron en una charla coloquio donde compartieron anécdotas y experiencias en sus respectivos países de acogida y participaron en una misa solemne presidida por el obispo de Ourense, Leonardo Lemos Montanet.
Tras una comida y sobremesa en un conocido restaurante del municipio portugués de Chaves, los participantes tuvieron la oportunidad de pasar la tarde en la villa del Arnoia, donde visitaron a las monjas clarisas del Monasterio de Santa Clara.
