TELÉFONO ROJO

Laureano Bermejo: "Ni he visto el gol de Iniesta"

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photo_camera Andrés Iniesta durante el partido de la fase de grupos de Rusia 2018 ante Marruecos y Laureano Bermejo.

Hablamos del Mundial con... Laureano Bermejo, secretario de organización de Ciudanos Galicia"

El teléfono rojo está resultando más imprevisible que De Gea defendiendo la portería de la selección. Si el día antes de que principiase el Mundial la académica Chus Pato reconoció que era "la primera la noticia" que le llegaba de que en Rusia se iba a disputar un torneo que mantiene en vilo a un gran trozo del planeta, ayer contestó quizá el único español que no ha visto el gol de Iniesta en la final de Sudáfrica. Laureano Bermejo, secretario de organización autonómico de Ciudadanos Galicia, avisa tan pronto escucha las razones de la llamada. "Lo siento, no te voy a ser de gran ayuda porque yo no le encuentro sentido al fútbol". Pero habrá visto algún partido. "Bueno tuve una experiencia cuando España ganó el Mundial. Como todo el mundo estaba hablando del partido, al llegar a casa me puse a ver el segundo tiempo. Al rato apagué porque pensé que quizá me podía gustar". Quiere decir que no vio ese gol que le permitió a la selección estampar una estrella encima del escudo que sólo lucen los campeones del mundo. "Puede que lo que voy a decir tenga algún coste electoral", bromea antes de continuar su explicación. "Lo cierto es que no lo he visto y si lo he visto en alguna repetición, no me acuerdo ni podría decirte como fue". 

Tiene mucha coña porque el padre era un excelente futbolista que manejaba las dos piernas con soltura. Pero ni por el padre, que le intentó contagiar la pasión, ni por su hijo, que nació futbolero como el abuelo. Laureano Bermejo, profesor y director de la autoescuela Campus de Ourense, perito judicial de seguros, estudiante de Antropología para ampliar conocimientos y ahora alistado en el equipo de Albert Rivera "porque la política es parte de la vida", sólo intentó en dos ocasiones hacerle caso a su progenitor. "Me pusieron de portero y me doblaron dos dedos de un balonazo". En ese momento perdió el poco interés que tenía. "Yo hice natación, milité en el Pabellón de Ourense y de hecho mi primer trabajo fue de socorrista". También enseñó a nadar a unos cuantos ourensanos, además de a conducir, pero con su hija le tocó el papel de profesora a la madre y con el hijo a la hermana. "Esto no va a quedar bien", vuelve a bromear.  

Al menos sabrá el resultado del primer partido de los octavos que enfrentó a Francia contra Argentina. "¿Cuándo jugaron?" Le da igual que Messi haya quedado eliminado y que Maradona y todo un país se vayan a la piltra al son de un tango lastimero. De la eliminatoria entre Portugal y Uruguay que se está disputando en el momento de la conversación casi mejor ni hablar. "Casi mejor que no. Sé que mañana –hoy para el lector– juega España porque tengo una comida con los afiliados de Ciudadanos en A Coruña y me han pedido que no se alargue demasiado para ver el partido. Y sé que es contra Rusia porque he leído que va a asistir Putin".


SENTIMIENTO DE UNIÓN


Resulta curioso en un dirigente de una formación cuyo líder, Albert Rivera, le encanta ver los partidos en pantalla gigante y rodeado de aficionados. "Lo que más me gusta de un acontecimiento de estas características es que despierta el sentimiento de unión de un pueblo", añade. "¿De verdad te gustaría ser el chófer de Putin en el Mundial?" Sabe la coña del chófer de anécdotas porque por la mañana ha leído la llamada del teléfono rojo a Yosi, vocalista y compositor de Los Suaves, y se paró porque le sorprendió ver su foto y un titular de los Ramones en las páginas de Deportes. "Si a mí me mira Putin como hizo con Obama el 6 de junio de 2014 durante la conmemoración del desembarco de Normandía, salgo pitando". También el chófer de anécdotas, pero hacia Rusia para asistir a lo que queda del Mundial más anfetamínico de la historia. "Por cierto, ¿Iniesta sigue jugando?", pregunta. Y ojalá vuelva a marcar en la final.  

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