Por su parte, el primer ministro ucraniano afirmó que las autoridades no albergan "excesivas expectativas" en relación con el documento firmado ayer en Ginebra para desactivar la crisis en el país.
El alcalde de la ciudad ucraniana de Donetsk, Alexandr Lukiánchenko, aseguró hoy que han comenzado las negociaciones con las milicias prorrusas que ocupan el edificio del Ayuntamiento.
"Estamos dialogando", afirmó el jefe del consistorio a la prensa local.
Lukiánchenko dijo que se propone aplicar el acuerdo alcanzado el jueves en Ginebra entre Ucrania, Rusia, Estados Unidos y la Unión Europea que obliga, entre otras cosas, a desarmar a las milicias irregulares prorrusas y a desalojar las sedes oficiales.
Moscú, que es acusado por Kiev de instigar la sublevación, prometió por su parte cooperar para que depongan las armas y abandonen las dependencias estatales que ocupan desde hace más de diez días, todo lo cual debe ser supervisado por observadores internacionales.
No obstante, no está claro que los líderes de la autoproclamada república popular de Donetsk acepten los términos del acuerdo de Ginebra, aunque ésta también contemple una amnistía para los participantes en la sublevación del sureste del país.
Entre los activistas prorrusos de Donetsk hay divergencia de opiniones sobre las condiciones para deponer las armas y desalojar los edificios públicos, ya que unos exigen la liberación de los presos y otros demandan la dimisión del Gobierno en Kiev.
Plantean también que el Sector de Derechas, la organización ultranacionalista que protagonizó los disturbios en Kiev, deponga las armas, que desmantelen el Maidán y que se convoque un referéndum sobre el modelo de Estado.
Por su parte, el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, afirmó hoy que las autoridades de Kiev no albergan "excesivas expectativas" en relación con el documento firmado ayer en Ginebra para desactivar la crisis en el país.
"Rusia se vio obligada a firmar la declaración y a condenar el extremismo... Al firmar la declaración Rusia ha exigido a los 'manifestantes pacíficos', pertrechados con fusiles Kálashnikov y misiles antiaéreos portátiles, que se desarmen y entreguen las armas", aseguró.
