El alcalde valora la "suave recuperación", a la que también contribuye la reforma de viejos inmuebles
Uno de los rasgos que identifica a Carballiño son sin duda los numerosos edificios, muchos de ellos de gran altura, fruto de unos años en los que el sector de la construcción era uno de los principales motores económicos del municipio. Por eso, la crisis económica sacudió con dureza a la villa, desplomándose el número de licencias de obra. En la actualidad, la construcción empieza a repuntar aunque muy tímidamente, con el incremento de licencias de viviendas unifamiliares y reforma de viejas casas, al mismo tiempo. Como dato significativo, durante el 2018 se construyeron un total de ocho naves industriales.
En lo que va del presente año hay que destacar que el Concello ha autorizado la construcción de dos viviendas unifamiliares, un nuevo edificio con un bajo y tres plantas en la praza da Veracruz, y también la reforma y ampliación de una planta en otro inmueble de la praza Maior. Se trata del primer edificio de nueva construcción y la primera ampliación desde 2016, en que se habían tramitado dos, después de cinco años sin registrarse ninguna solicitud por este concepto.
Si en el año 2007 se concedieron un total de 55 licencias, de las que 23 habían sido viviendas unifamiliares y tres naves industriales, lo que resta habían sido edificios de dos a cinco plantas, con bajo y sótano. A partir de ahí comenzó el descenso que se hizo más evidente en el 2010 con tan soló 17 licencias para nueve unifamiliares y cinco reformas, continuando la caída hasta que en 2015 sumaron 33, aunque sin ningún edificio.
Al siguiente año se redujeron los proyectos de obra a 11, si bien se levantaron dos edificaciones; y en 2017 aumentaron las viviendas unifamiliares hasta nueve y las reformas hasta cinco. El pasado año se mantuvo el número de unifamiliares y se rehabilitaron siete casas (entre ellos el edificio Gazpara), además de ocho naves.
El alcalde, Francisco Fumega, declaraba que "a partir do 2009 houbo unha caída brusca que agora se recupera aínda que moi suavemente, coas vivendas unifamiliares en un importante auxe de reformas de casas vellas. Hai que destacar o incremento de naves industriais o que se traduce en que están vindo novas empresas e novos investimentos, tamén que hai un novo edificio despois de moito tempo".
