La celebración gastronómica precedió por la mañana a la exhibición de música, colorido y buen humor de la tarde.
Carballiño despidió el Entroido con la vigésima edición de la Festa da Cachucha y un gran desfile, recuperando el que se tuvo que suspender el pasado martes a causa de la lluvia. Ayer acompañó el buen tiempo y por la mañana la villa era un hervidero de gentes, muchas de ellas disfrazadas. A partir de las 13.00 horas, charangas, la Banda de Gaitas y un gran folión integrado por 120 tambores anunciaban por las calles la XX edición de la Festa da Cachucha, en la que participaron una veintena de restaurantes y mesones de la villa, abarrotados de personas deseosas de disfrutar de este delicioso manjar.
Ya por la tarde, miles de personas de personas se congregaron en las calles más céntricas para presenciar el desfile, en el que participaron 16 agrupaciones, junto a numerosas comparsas, charangas, un gran folión, la Banda de Gaitas, disfraces individuales y grupos procedentes de toda la comarca, que llenaron la villa de música, colorido y buen humor.
La fiesta culminó con una verbena, que comenzaba a las 19.00 horas en la Praza Maior y que ponía el cierre al Entroido carballiñés de 2014.