La familia Manzano, del poblado de A Pena, agasajará a 700 invitados durante tres días de celebración.
Gitanos de toda Galicia se desplazarán a Carballiño para asistir a la boda de la hija menor del patriarca del poblado de A Pena. Un gran acontecimiento para la familia Manzano que ultima los preparativos para recibir a cerca de 700 invitados entre familiares y amigos. "Se casa mi princesa", manifestaba emocionado Edelmiro Manzano, acompañado por su esposa, Angélica Navarre, refiriéndose a su hija que se llama igual que la princesa de España, Leticia, y que contrae matrimonio con Fabián Gavarre, vecino de Maside.
Manzano relata que la boda se celebrará siguiendo el ritual tradicional de los gitanos, que se remonta a hace más de 500 años. Será el día 6 del próximo mes de marzo y se prolongará durante tres días con sus respectivas noches.
La familia, que habita en A Pena, ya lo tiene todo preparado y así lo narraba Edelmiro Manzano. La ceremonia religiosa será oficiada por el pastor Ramón, en la iglesia Evangélica del poblado de A Fontela (Maside). Previamente, indica el patriarca, la novia se someterá al ritual para la comprobación de su virginidad, para lo que contarán con una mujer experta que lo acreditará; "viene de Pontevedra", puntualizó.
Tras la ceremonia religiosa, cuyos padrinos serán Antonio Gavarre y María Gavarre, empezará la fiesta, a partir de las 17,00 horas, que se desarrollará en una nave propiedad de los Manzano, ya que aseguran que no les gustan los restaurantes y prefieren un lugar privado para disfrutar en la intimidad, máxime en este caso que durará tres días.
VESTUARIO
Hombres y mujeres lucirán sus mejores galas y joyas, símbolo de riqueza. Manzano apuntaba que "las mujeres hace mucho tiempo que están ahorrando para comprarse sus vestidos, ya que algunos cuestan hasta 6.000 euros y prefieren los modelos procedentes de Marruecos y la India, les gustan ese tipo de telas", asegura.
Los gastos de la boda correrán por cuenta de las familias del novio y la novia, si bien todos los invitados contribuyen, cada uno con lo que puede. Para ello, también forma parte del ritual una tarta, en este caso de 16 pisos, en la que es costumbre que los asistentes cuelguen sus donativos en metálico. En ese sentido, señalaban que "cada uno da lo que puede, hay algunos que regalan hasta 1.000 o 2.000 euros, otros 500 y otros 5 euros".
Para los tres días de fiesta, las mujeres cocinarán diversos menús, asegura Edelmiro Manzano que ha encargado 200 kilos de zancos de pollo y 20 jamones para asar. La música y el baile tampoco faltarán en esta celebración de especial relevancia para los gitanos de Galicia por tratarse de la hija menor de un patriarca, que no va a escatimar en gastos para que sea un gran acontecimiento, al más puro estilo tradicional de su pueblo.
EL POBLADO
La familia Manzano habita el poblado de A Pena, que pertenece al municipio de Carballiño. El anterior gobierno municipal les había construido varias casas de hormigón, que sustituyeron a las chabolas de madera, con el fin de mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Aunque las construcciones ocupan un espacio público y se había hecho de forma provisional, lo cierto es que A Pena se ha convertido con el paso de los años en un barrio más de Carballiño, que está situado justo en frente del Centro de Salud y que es el territorio de los Manzano.
El patriarca ejerce como tal, hasta el punto de colocar carteles a la entrada del poblado prohibiendo terminantemente el tráfico y consumo de estupefacientes en su entorno. Según aseguraba ayer Edelmiro Manzano, en vísperas de la boda de la más pequeña de sus nueve hijos, "los intrusos que se acercaban al poblado con droga ya no han vuelto", mostrándose satisfecho con la medida que adoptó, ya que incluso amenaza con una paliza a quienes no cumplan con su norma. n
