De 19 proyectos de restauración, sólo nueve culminaron en 2017
El impacto de la crisis también ha repercutido en las ayudas económicas que se proporcionan a los propietarios de viviendas del casco histórico de Ribadavia, sometidas a un programa de rehabilitación puesto en marcha en el año 2000 a través de convenios de colaboración entre el propio Concello, el Ministerio de Fomento y el Instituto Galego da Vivenda.
Así, de los 19 proyectos presentados y aprobados durante el pasado año tan sólo fueron ejecutados nueve, a pesar de que el municipio disponía de un total de 116.000 euros para subvencionar tanto la elaboración de las memorias técnicas como las propias obras de rehabilitación. Y es que, en la actualidad, la subvención máxima que se puede percibir es de 11.000 euros, además de un 35% del presupuesto del proyecto correspondiente, cuando anteriormente era de 11.600 euros y el porcentaje de ayuda ascendía al 75% sobre el coste global.
En este sentido, y según los datos aportados por el Concello ribadaviense, se pasó de una media anual de 30 reformas ejecutadas entre 2000 y 2007, a una de seis entre 2008 y 2015. Estas reducciones motivaron que una buena parte de los vecinos interesados en reformar sus inmuebles renunciaran a hacerlo, una situación que está repercutiendo negativamente en el volumen de negocio de constructoras y de aquellos autónomos que realizan tareas auxiliares como carpintería, electricidad, fontanería o pintura, entre otros.
El plan desarrollado durante los últimos 17 años para la recuperación del casco histórico de Ribadavia ya ha alcanzado los 218 inmuebles, una cantidad que supone un porcentaje aproximado del 30% del volumen constructivo existente en la zona urbana protegida.
