El pleno aprobó otra partida de 40.000 euros para afrontar más pagos derivados de sentencias
El pleno de Ribadavia aprobó sin debate y con los votos favorables del grupo de gobierno socialista y del PP, mientras el BNG se abstenía, una modificación presupuestaria por un importe total de 125.386 euros. Esta medida permitirá hacer la aportación económica a tres proyectos subvencionados por la Administración autonómica, al mismo tiempo que se destinarán 20.000 euros al pago de dos facturas atrasadas, que debe abonar el Concello tras recibir en estos últimos días sendas sentencias judiciales. El concejal de Hacienda, Javier Iglesias, piensa que éstas serán las últimas después de haber gastado por este concepto en las dos últimas legislaturas entre 250.000 y 300.000 euros, correspondientes a deudas contraídas por el Ayuntamiento durante gobiernos anteriores al de los socialistas y que se han ido resolviendo mediante contenciosos administrativos.
La mayoría de las deudas eran el resultado de las discrepancias entre Concello y diversas empresas a la hora de certificar una determinada obra, con la que las autoridades locales no habían quedado conformes y en consecuencia no pagaron. Otro tipo de facturas corresponden a la redacción de proyectos encargados, pero que no se llegaron a ejecutar y tampoco se abonaron.
DENUNCIAS
"La mayoría son denuncias de empresas, particulares sólo hay alguno muy puntual", indicaba Javier Iglesias. Precisamente, una de estas dos sentencias que acaba de recibir el Concello ha sido a consecuencia de la denuncia de un vecino al que el anterior gobierno municipal había negado la licencia de una obra y que ahora ha ganado el contencioso, por lo que el Concello tendrá que hacerse cargo de las costas y gastos de representación, que suman en torno a los 7.000 euros. No obstante, la más grande corresponde a una deuda con la empresa que remodeló la Alameda y construyó el parking subterráneo, y que ronda los 14.000 euros.
Este año, los presupuestos municipales ya contemplaban inicialmente 20.000 euros para este fin (otros años se reservaban entre 40.000 y 50.000 euros), pero según informó Javier Iglesias a la Corporación, se gastaron antes de finalizar el presente ejercicio económico, así que ha necesario recurrir a esta modificación presupuestaria para abonar estas dos últimas facturas.
El grupo de gobierno también contempla otros 20.000 euros para hacer frente a los gastos de reparaciones de la red eléctrica, a raíz de los robos del cableado.
