EDUCACIÓN

Los 19 bachilleres más top

IES Blanco Amor
photo_camera Un grupo de alumnos del primer curso de "STEMBach" que estrena el Ies Blanco Amor, junto al coordinador del proyecto, Francisco Boán, al fondo a la derecha.

El IES Blanco Amor es el único centro ourensano que implanta el Bachillerato de excelencia "STEMbach". Dedican más horas de estudio, colaboran con el Campus y defenderán una investigación ante un tribunal. 

Suena el timbre del recreo en el IES Blanco Amor y Brais, Elena, Gonzalo, Iria y compañía bajan con los libros. Esa costumbre de repasar para un examen 20 minutos antes. En total son 19 "pioneros" en cursar el Bachillerato de excelencia en ciencias y tecnología "STEMbach", una experiencia educativa que este centro ourensano prueba por primera vez. Es el único de la provincia en apostar por esta modalidad, casi a ciegas, y contra el tiempo. 

"Los plazos fueron muy tarde y seguro que a muchos no les dio tiempo a valorar la opción. Es un experimento, el primero en Galicia y en España. En Europa y en Estados Unidos lleva años funcionando. Esto va a estar en auge pronto", adelanta el director del instituto, Carlos Ferreiro.

Los bachilleres de STEMbach tendrán que realizar un proyecto de investigación que defenderán delante de un tribunal de expertos al finalizar el segundo curso. Como una carrera universitaria. Para ello, les ayudarán profesores de la Escola de Enxeñaría Aeroespacial, la Escola de Informática y docentes de matemáticas, física, química y biología de la UVigo. 


El plus de esfuerzo


Por la mañana acuden a clases con el resto de compañeros. Por la tarde, los 19 se juntan para aprender sobre criptografía, bases de datos o programación. Además, acuden a seminarios y cursos de universidades y centros investigadores. La excelencia pide un plus de esfuerzo.

"A mí me está resultando fácil. Me apuntó mi padre y yo no tenía ni idea de lo que era. Me metí por ciencias porque quiero entrar al ejército y suma puntos, pero la verdad... le he cogido gusto a la criptografía", cuenta Gonzalo Palomanes.

A Iria González le vino "que ni pintado" este Bachillerato para ahondar en las competencias matemáticas y científicas. "Levo anos indo as Aulas Tecnópole e facendo proxectos dende que empecei a ESO. Encántanme as matemáticas e de momento estame gustando o que aprendemos", señala.

Menos convencida con las matemáticas está Elena Dacosta, que tira por la biología. "Aínda que non me gusten as matemáticas, o que estamos facendo estame abrindo os ollos a outras ramas", dice.


“Sáese do clásico"


Brais González no dudó en apuntarse al STEMbach, aunque todo fuese muy precipitado. "Semellaba algo diferente, sáese do clásico. Gústanme as innovacións e isto era unha delas", relata. Sobre el esfuerzo complementario al Bachillerato que cursa por las mañanas apunta que "hai que ter moita capacidade de abstracción, pero merece a pena".

"Este bacharelato estimula as inquietudes pola ciencia, as matemáticas e a tecnoloxía dos rapaces", añade el coordinador del STEMbach del IES Blanco Amor, Francisco Boán, que sonríe ante el relato de sus pupilos y se anima a posar en la foto de familia antes de que suene el timbre. n

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