La madre de la denunciante, en calidad de testigos, "no presenciaron agresión alguna".
La magistrada del Juzgado de lo Penal 2 de Ourense absolvió a Iván R.F. de dos delitos de maltrato, por los que fue llamado al banquillo de los acusados el pasado 12 de mayo. Sin embargo, fue condenado a dos días de localización permanente por una falta de maltrato. El ministerio público solicitó inicialmente una pena de 12 días, pero le fueron aplicadas las atenuantes de drogadicción y dilaciones indebidas.
Según recogen los hechos probados de la sentencia, "no ha resultado acreditado" que el 23 de septiembre de 2013 el encausado agrediese en el marco de una discusión a su pareja, quien lo denunció, pero sí asestó un golpe en el rostro a una tercera persona, presente en el lugar de los hechos. Asimismo, "no ha podido probarse que maltratase habitualmente a la mujer durante la convivencia", como ella explicó ante la jueza. Y es que los agentes de la Policía Nacional y la madre de la denunciante, en calidad de testigos, "no presenciaron agresión alguna".
