La denunciante sostiene que mientras la penetró vaginalmente le decía: "Si no eres para mi no eres para nadie"
La Audiencia juzgará en junio a Arturo F.P. por la denuncia de violación y lesiones de una mujer a la que conoció la misma noche de los hechos en un bar de copas de la ciudad. El procesado, en prisión provisional desde hace más de un año por esta agresión sexual, se enfrenta a una petición de hasta 12 años de cárcel (la fiscalía reclama 10) e indemnizaciones de 30.000 euros (20.000 la acusación pública).
El abogado de la defensa, por su parte, no reconoce el delito. El inculpado alega que hubo un contacto sexual consentido, pero matiza que sin penetración y sin violencia.
Los hechos a los que alude el sumario sucedieron a las 04.30 horas de la madrugada del 2 de febrero de 2017. El procesado estaba en un bar con dos amigos y uno de ellos conocía de vista a la denunciante, con quien comenzaron a hablar. Según esa versión, en el local ya intimaron.
Ahora bien, la víctima sostiene una versión totalmente distinta. El inculpado, según su testimonio, se empeñó en acompañarla a casa. Así lo hizo pese a sus reticencias. Durante el trayecto, comenzó a propasarse hasta que a la altura de la puerta del garaje en Marcelo Macías se abalanzó sobre ella y la violó en el suelo mientras le decía "si no eres para mí, no eres para nadie". La mujer asegura que intentó resistirse, pero que durante el forcejeo le sujetó el cuello y le metió los dedos en la boca para evitar que gritara. Los gritos de la víctima alertaron a un conductor que circulaba por las inmediaciones, quien avisió a la policía y detuvo al supuesto violador.
El procesado admite que hubo un forcejeo en el que ella cayó al suelo porque, según dice, la mujer le arañó la cara en el momento en que se sintió molesta al tocarle los genitales.
