VIOLENCIA DE GÉNERO

Acusan de maltrato a un ourensano a los tres días de salir de la cárcel por ese delito

La esposa tuvo que pedir auxilio policial encerrada en una habitación. El penal 2 juzgará a Rubén L.G., un supuesto maltratador cuya pareja obtuvo una orden de alejamiento por "riesgo extremo" para su vida

El Juzgado de lo Penal 1 aplazó ayer, por ausencia de la única testigo, un juicio por maltrato en el que figura como inculpado Antonio S.P. (62 años), para quien el fiscal reclama cinco meses de prisión y alejamiento de la víctima durante tres años. En la petición de pena tiene en cuenta una atenuante de embriaguez y una agravante de reincidencia. 

El acusado, según el escrito del ministerio fiscal, insultó y se abalanzó sobre su mujer, quien se refugió en una habitación de la vivienda y desde allí reclamó el auxilio policial, solo tres días después de salir de prisión, el 3 de noviembre de 2015. El Juzgado de lo Penal 2 de Vitoria lo había condenado en 2013 por un delito de violencia contra la mujer.

En la denuncia que ahora sustenta este proceso judicial, la víctima fue arrojada de forma violenta sobre la cama hasta que consiguió escaparse y encerrarse en la habitación, a la cual el inculpado trató de acceder a través de una ventana.

Por su parte, el Penal 2 aplazó ayer para el próximo mes, por la incomparecencia de testigos, un juicio por maltrato y amenazas en el que está acusado Rubén L.G., quien el pasado mes fue condenado a seis meses de prisión por quebrantar una orden de alejamiento con respecto a su pareja, en un caso de riesgo extremo (se teme por su vida).

La causa ahora pendiente se sustenta en unos hechos por los que se dictó la prohibición de acercarse a la perjudicada. Sucedieron el 20 de octubre de 2017 en el domicilio que compartían en Emilia Pardo Bazán. Según la acusación pública, Rubén L.G. arrojó a la víctima al suelo y, encima de ella, comenzó a golpearle la cara. También, según el fiscal, la amenazó con un cuchillo de 31 centímetro de hoja con frases como "si voy detenido, te mato". Al poco tiempo, volvió a propinarle un puñetazo en la boca, según consta en el escrito de acusación. Por estos hechos, se enfrenta a dos años de cárcel y cuatro años de alejamiento. 

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