Hasta el 30 de junio apenas había destinado un millón de euros, y entre julio y agosto se sumó 42
Adif pisó el acelerador de las licitaciones al AVE gallego en los meses de julio y agosto. Tras un primer semestre de 2017 en el que los contratos a concurso no habían sumado ni tan siquiera el millón de euros, en los dos meses siguientes la cifra suma un total de 42,52 millones de euros.
El balance de las inversiones realizadas a lo largo del primer semestre de 2017 en obras ferroviarias, publicado esta semana presenta un saldo muy negativo en relación a 2016. En el caso del Adif, los contratos licitados sumaron 84,81 millones, un 53 por ciento menos que en el mismo período del año anterior. Si se suman los contratos licitados por todas las administraciones públicas en materia ferroviaria, la cifra se eleva a 264,87 millones, frente a los más de 400 millones del mismo semestre de 2016, lo que representa una caída del 34,3 por ciento.
La caída de la inversión ferroviaria se agudiza mucho más si se focaliza la atención en el AVE gallego. A lo largo de los seis primeros meses del presente año, los contratos licitados no llegan a alcanzar el millón en todo el trazado en obras o en proyecto, desde Zamora hasta Ourense. El mayor contrato licitado en el primer semestre, por importe de 649.000 euros, fue publicado en el mes de mayo y tenía por objeto el suministro y transporte de un lote de desvíos de ancho mixto a la salida de la estación de Zamora en dirección a Ourense. Los restantes se refieren a la contratación de servicios de menor cuantía, entre los que se incluían los de elaboración de informes periciales para resolver los litigios pendientes con algunas de las UTE contratistas de tramos que habían sido paralizados por diferencias en los sobrecostes, o el proyecto para el montaje de la vía entre Campobecerros y Taboadela, por importe de 220.000 euros.
Calendario incumplido
Ese desierto inversor del primer semestre en el AVE gallego se hizo más patente ante el compromiso incumplido de un calendario de licitaciones para las obras de conexión del AVE con la estación de Ourense a través de la línea convencional desde Taboadela, que fijaba para el segundo trimestre de 2017 la licitación del proyecto del ramal de dos kilómetros que deberá unir el trazado de alta velocidad y la línea convencional desde la estación de Taboadela.
Cambio de rumbo
Sin embargo, a partir del mes de julio el AVE gallego cambió de suerte. En poco más de cuarenta días, los contratos licitados por Adif Alta Velocidad para esta infraestructura superaron los 42,5 millones de euros. De ellos, alrededor de 40 millones están destinados al tramo Zamora Pedralba y, más concretamente, al suministro de traviesas, balasto y carril para el montaje de la vía en los 111 kilómetros que tienen que estar operativos, según el compromiso del ministro de Fomento, para el último trimestre del año que viene. Entre los contratos licitados se encuentran también el proyecto de la futura terminal de viajeros y la pasarela de la estación de Santiago de Compostela, por algo más de 1,1 millones de euros.
Septiembre mantiene ritmo
El cambio de rumbo en el ritmo de licitaciones también se espera para este mes de septiembre, para el que Adif ya ha anunciado la licitación del ramal de conexión entre la línea de alta velocidad y la vía convencional en Taboadela, obra cuyo importe se estima que ascenderá a 5,9 millones de euros. Si el segundo contrato cumpliese con el plazo inicialmente establecido en el anuncio publicado en el Diario Oficial de la Unión Europea el pasado día 14 de abril, relativo a la adaptación de la vía convencional entre Taboadela y Ourense Empalme para su uso polivalente con la implantación de un tercer carril, tendría que estar licitado también antes de finalizar el mes de septiembre, con un importe calculado en torno a los 23 millones de euros.
