Asegura que la cofinanciación solo afecta a la estación, lo que permitiría ejecutar la variante exterior
El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) descarta ahora la utilización de fondos de la Unión Europea en la adecuación integral de la línea entre Taboadela y Ourense, anunciada el pasado martes para permitir que los trenes AVE lleguen a la estación del Empalme a finales de 2019.
"Esta actuación podrá ser cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) a través del P.O. Crecimiento Sostenible 2014-2020, Objetivo Temático 7: Transporte Sostenible", explicaba Adif tras relatar las actuaciones necesarias para adaptar el trazado actual, con una inversión que ascendía a 103 millones.
Este instrumento de financiación había contribuido a crear más incógnitas sobre los planes del Ministerio de Fomento en relación a la variante exterior, alertando el portavoz del PSOE en el Concello de Ourense, José Ángel Vázquez Barquero, de que "estos fondos tienen la particularidad de ser de inversión, no de gasto corriente, por lo que no pueden ser destinados a soluciones transitorias, sino a definitivas, por lo que se concluye que no contemplan la variante".
Pese a que Adif no contestó durante la jornada del jueves a las preguntas de este periódico sobre esta circunstancia, ayer explicó que solo se acudirá a los fondos europeos para cofinanciar las actuaciones previstas en la playa de vías de la estación del Empalme, presupuestadas en unos 20 millones y dirigidas a liberar terrenos para la construcción de la futura terminal de autobuses que integrará el complejo intermodal.
De esta manera, el organismo del Ministerio de Fomento garantiza que no habrá trabas burocráticas para que la variante exterior sea una realidad. "Las actuaciones son complementarias y permitirán la continuidad de la conexión ferroviaria de alta velocidad entre la ciudad de Ourense y la meseta mientras se tramita y construye la variante exterior", ratificaba Adif el martes. Según la proyección presupuestaria, el nuevo trazado no estaría listo hasta 2024, tras una inversión de 585 millones.
La seguridad del trazado, por 32 millones
Adif ya tiene planificada la totalidad de la inversión prevista en la solución provisional del AVE, que ascenderá a 103,6 millones de euros.
En el desglose de actuaciones a realizar para garantizar la conclusión de los trabajos a finales de 2019, la mayor parte (34,6 millones) se la lleva la implantación del tercer hilo en el trazado, que permitirá circular a los trenes AVE por el ancho estándar.
Por su parte, todas las instalaciones de seguridad (ERTMS, GSMR) y las comunicaciones fijas y móviles supondrán desembolsar 32 millones. Mientras, el ramal de conexión entre el viejo y el nuevo trazado, así como el cambiador de ancho en Taboadela se llevará 14,6 millones. La electrificación de la línea y la actuación en subestaciones eléctricas requerirán 10 millones, mientras que se reservan 12 a actuaciones complementarias.
