Los vecinos exigen acciones contra la continua degradación del Parque Infantil y la Alameda
La situación de grave deterioro que están sufriendo algunos parques y zonas de ocio del centro del casco urbano de la ciudad, ante la pasividad de las autoridades locales y la falta de efectividad de la Policía Local, ha sembrado la alarma entre vecinos y comerciantes. De especialmente grave se puede calificar la situación del denominado Parque Infantil o alameda del Cruceiro, al lado de la calle Concejo. "Continuamente me llegan protestas de los vecinos", señala el presidente de la asociación de vecinos de Ourense Centro, Martín Amaro, quien destaca que "sería un parque ideal para que jugaran los niños si se pusiera en valor". Algo para lo que, en su opinión, sería necesario "recuperar el parterre que da a la calle Progreso e incorporar vigilancia, porque en más de una ocasión se han visto jeringuillas tiradas en el suelo". Ayer mismo se producía el enésimo altercado entre un grupo de vagabundos, en el que finalmente intervino la Policía Local, que se negó después a dar información sobre su actuación.
No es el único problema que destaca el presidente de la asociación vecinal. "También sería importante un mayor control del vertido de los restos del Punto de Atención Continuada situado al lado y que rebosan el contenedor situado allí al efecto". Martín Amaro señala que "ya hemos recogido estas críticas y reclamado una solución por parte del Concello, a través de un escrito que pasamos a la Federación Limiar y que desde allí se pasó por Registro en su momento".
En el equipo de gobierno municipal dicen ser conscientes del problema y, de hecho, según señala José Araújo, edil de Infraestructuras, "estamos trabajando en la redacción de un proyecto de humanización de ese parque". Aunque el proyecto está en su primera fase, sí se puede avanzar que "es una actuación compleja que, según nos han señalado los técnicos, superaría los 500.000 euros de presupuesto, ya que hay que hacer obras para mejorar los accesos y nuestra idea es crear un proyecto integrador, en el que puedan convivir mayores y pequeños, y que contemple un parque de juegos inclusivo".
Otro de los puntos negros del centro del casco urbano es la Alameda de Correos. Emilio González, presidente de la asociación de comerciantes de la Plaza de Abastos no duda en señalar que "últimamente está siendo escandaloso, tanto lo que pasa en la Alameda como lo que se traslada al Rianxo durante la madrugada, cuando los placeros están trabajando para recoger la mercancía".
El presidente de los placeros apunta que "hay gente que se pone a mear, a cagar y a hacer cualquier cosa delante de gente que viene a trabajar a las tres y a las cuatro de la mañana para permitir a los ourensanos comer las mejores legumbres de toda Galicia".
Emilio González certifica que "en los últimos tiempos se ha agudizado el problema y hay que poner los medios para atajarlo y obligar a que se respete el trabajo de la gente". A las gamberradas que se suceden cada fin de semana y que se traducen en deterioro del mobiliario urbano de la Alameda se unen "los robos que en los últimos tiempos hemos tenido en los locales del Rianxo".
La preocupación ya ha sido trasladada al Concello "a través de varios escritos" y los placeros esperan que se incremente el control de la Policía Local, "pero también de la Nacional", señala González.
