El entorno de la fábrica de transformación de madera Orember registró un estancamiento en forma de neblina que tapó el sol durante varias horas
Una densa capa de humo estancado ocultaba el cielo en las primeras horas del día de ayer, originada por las emisiones de la fábrica de transformación de madera Orember, y ocultó el cielo en prácticamente todo el Polígono de San Cibrao das Viñas. La humareda acumulada, en forma de neblina, dificultó la visión del sol durante desde las ocho de la mañana hasta cerca del mediodía, alertando a los vecinos y trabajadores de la zona, mientras desde la empresa descartaban ningún tipo de anomalía en sus procesos.
Tanto desde la Asociación de Empresarios del Polígono de San Cibrao como desde la estación de Bomberos del Polígono de San Cibrao afirmaron tener constancia de la densa capa de humo que cubrió el cielo en la zona industrial, mientras algunos trabajadores de la zona también fueron testigos: "Alrededor de las nueve de la mañana pegaba fuerte el sol pero al llegar a la calle principal del polígono, una humareda negra cubría totalmente la luz solar", aseguraba un trabajador de la calle 4 de la zona industrial.
A finales de 2010, un informe de Ramón Varela, doctor en Biología y ex presidente de Adega, alertaba de la necesidad de "controlar as emisións das industrias na periferia das cidades", y situaba varias empresas en el punto de mira, entre las las que estaba Finsa-Orember, además de Finsa en Santiago de Compostela, Ence en Pontevedra o Repsol en A Coruña.
En 2010, la fábrica de Orember emitió 119 toneladas de óxidos de nitrógeno, según el registro de emisiones PRTR, cantidad de gases tóxicos que en 2015, último período registrado, ascendió hasta las 1.110 toneladas emitidas.
La asociación ecologistaAdega ya denunció en diversas ocasiones problemas por la detección de "polvillo" en los coches, las casas y las terrazas de las zonas situadas en los alrededores de la fábrica, y los propios vecinos de Reboredo exigieron más controles a la Consellería de Medio Ambiente en 2007, al percatarse de que había en el pueblo partículas desprendidas durante el proceso de secado de la fibra con la que se elaboran tableros, que excedió en varias ocasiones los niveles normales. "A empresa recoñeceu no seu momento que había problemas cos filtros, que poderían estar tupidos por unha cuestión de mantemento, polo que había emisión de partículas que saía das combustións co diesel, e podería ser que neste caso acontencese o mesmo, aínda que non temos coñecemento de que sexa algo habitual", dijeron ayer desde la delegación de la plataforma ecologista en Ourense.
Desde la empresa Orember, ayer aseguraron que el funcionamiento era "normal" y no se percataron de ninguna "anomalía", mientras que desde la Asociación de Empresarios del Polígono vincularon el encapotamiento matutino del cielo a la posibilidad de una "acumulación fruto de emitir más humo de lo habitual", sin darle mayor importancia.
Al alcalde de San Cibrao das Viñas, Manuel Fernández Moreiras, no le consta el regreso de problemas ambientales la zona, aunque advirtió: "Cando se lle deu a licenza tiña as medicións correctas. Nós non temos vixilancia de todas as empresas, polo que mentres pasen os informes correspondentes non temos nada que dicir. Iso si, se non cumprise podería ser sancionada, e iso sábeno".
