Antes de la crisis el 14,8% de los hogares en la ciudad eran arrendados y en la actualidad el porcentaje ha crecido hasta el 20,4%
La crisis económica o el cierre del grifo hipotecario pueden ser solo dos de las circunstancias que justifican un cambio de modelo inmobiliario que prima el alquiler frente a la compra de viviendas. Según un estudio hecho por la Federación Galega de Empresas Inmobiliarias (Fegein), "en los últimos cinco años el mercado de la vivienda ha sufrido una profunda transformación".
Subraya que en los periodos anteriores a la crisis en la provincia el mercado del alquiler representaba un 8,65% de los hogares, con un gasto medio de 270 euros mensuales de media, mientras que en la actualidad el índice de vivienda alquilada ha llegado ya al 9,80% con un gasto medio de 300 euros en concepto de renta.
Fegein alude a que en la ciudad esos porcentajes son más altos ya que entre el 2007 y el 2011 se pasó de un 14,83% a un 15,52%, respectivamente. En la actualidad el dato sube hasta el 20,4% "y la tendencia sigue en alza", según hace notar la patronal del sector. De las cuentas que echa esta organización se concluye que "tres de cada cuatro operaciones en el mercado de la vivienda en el último año son de arrendamiento, con lo cual volvemos a hablar de un mercado del alquiler que cotiza al alza por su rentabilidad para los propietarios".
Por lo que respecta a los precios medios, Fegein identifica varias zonas urbanas con una gran oscilación de precios. Por ejemplo, una vivienda de dos o tres habitaciones, amueblada, y en la zona centro se paga en torno a 550 euros. Es la trama urbana con precios más caros, lo que contrasta con zonas como O Polvorín o algunas calles de O Vinteún, con unas rentas mensuales entre 300 y 350 euros, con lo que la oscilación de precios entre los extremos puede estar en una media de 200 euros mensuales.
LA PROVINCIA
Como es obvio, las diferencias entre la ciudad y las villas de la provincia son importantes, salvo en concellos próximos a la capital. En este sentido se destaca Barbadás, concretamente el barrio de A Valenzá, donde el precio medio de alquiler está en 380 euros. Por lo demás, en Maceda el coste es de 250 euros mensuales; en Allariz, 325; en Xinzo de Limia, 320; en O Carballiño, 280; en Ribadavia, 250; en Celanova, 275; en Valdeorras, 350; en Verín, 350; en Castro Caldelas o Trives, 220 euros y San Cibrao, 325 euros.
El incremento de la demanda sobre este tipo de operaciones propicia también un paulatino incremento de precios, aunque moderado. La patronal del sector inmobiliario el precio medio del alquiler en Galicia en este primer trimestre en relación al mismo periodo del 2015 ha pasado de 5,1 euros a 5,3 euros por metro cuadrado. En el caso de Ourense la variación interanual es de un 0,7%.
En todo caso, pese a que las cifras del alquiler van a más en la provincia, todavía está lejos de la importancia que tiene algunos otros países. Fegein destaca que "nuestro mercado de alquiler es aún débil, al suponer un 18% frente al 82% que supone el de la propiedad (datos estatales), mientras que en la Unión Europea el mercado de la vivienda en alquiler representa el 38% frente al 62% de vivienda en propiedad".
