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Ángela Fernández: "Escribir para los niños es difícil, son el lector más exigente"

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photo_camera Ángela Fernández.

La escritora ourensana Ángela Fernández presentó este martes en el Liceo su segundo libro infantil, "Chitón ata a Fin da Terra"

La escritora Ángela Fernández, natural de Ourense aunque en la actualidad es residente en Ames, "por motivos de trabajo" -es funcionaria de la Xunta-, presentó este martes en el Liceo su segundo libro infantil, "Chitón ata a Fin da Terra". Con el primero, "Por qué está triste Miañas?",  ganó el premio Pura y Dora Vázquez del año 2012. Ha sido, además, una de las seis personas ganadoras del certamen literario de poesía Concello de Amoeiro con "O meu mundo".

Hábleme de este nuevo trabajo literario, nuevamente dirigido al mundo infantil. 

Ante todo, es un libro educativo. Me gusta que los niños se formen en valores y eso es lo que pretendo con la aventura que cuenta este libro. En la obra hablo de un murciélago -un animal que vive de noche- y una gaviota, que es un ave diurna; son dos seres pertenecientes a mundos completamente distintos que se conocen y entablan amistad por encima de sus diferencias. Ese, el de entender que no hay diferencias, es uno de los valores principales que intenta inculcar el libro.

¿Qué significó ese premio Pura y Dora Vázquez para su carrera literaria?

Fue el impulso definitivo, lo que me decidió a seguir escribiendo. Hacerlo para niños es especialmente exigente y difícil, son un público que te pide mucho, pero también muy agradecido.

¿Cómo surgió su gusto por escribir?

Lo tuve desde pequeña y lo prolongué en la adolescencia. Durante un tiempo escribí obras para la pequeña compañía de teatro que teníamos. De hecho, "Por qué está triste Miañas?" es la adaptación a cuento de una de esas obras que no se llegó a representar.

¿Y qué nos cuenta "Chitón ata a Fin da Terra"?

Es una aventura, la de un murciélago recién nacido que va en contra de su naturaleza y quiere ver cómo se vive de día, para lo que se vale de su amiga gaviota, con la que recorre localizaciones que son reales y yo conozco bien, como el monte Píndaro, Fisterra o la fervenza de Ézaro. A través de este viaje aventurero, voy administrando conocimientos de esos lugares que recorren. 

¿Y qué me dice de las ilustraciones?

Las ilustraciones son esenciales para llamar la atención del niño, son como el escaparate que te invita a ver el interior. En este caso, creo que realmente llaman la atención.

¿Qué proyectos tiene?

Tengo otros dos libros terminados, la segunda parte de Miaños y otro que va dedicado a mi padre, que falleció hace cuatro años.  Y a lo mejor continúo con Chitón en otros espacios, un Chitón aventurero, como Jesús Calleja.

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