ENTREVISTA

Angy Fernández: “Al final, se trata de mentir para sobrevivir y que todo siga igual"

"La comedia de las mentiras" llega hoy a las 19,00 horas, al Principal de Ourense con la actriz como una de las protagonistas

En la Grecia clásica, para que el amor triunfe, a veces, es necesario mentir. Calidoro, el esclavo, lo sabe bien porque con sus embustes debe conseguir mantener el orden de la unidad familiar a la que sirve. Es aquí cuando entra en escena Angy Fernández, en el papel de Hipólita, que se verá inmersa de lleno en las aventuras amorosas de la obra "La comedia de las mentiras", que llega hoy, a las 19,00 horas, al Principal. 

¿Cómo describiría el personaje que interpreta?

Hipólita está un poco loca, tiene muy mala leche y es muy caprichosa. Además, se acaba de echar un novio al que tiene un poquito dominado y que su padre no acepta. Su hermano Leónidas, con el que se lleva mal, también acaba de enamorarse de una flautista que, curiosamente se llama Gimnasia. 

¿El amor se presta a la confusión en la obra?

Para que las relaciones amorosas triunfen se van urdiendo mentiras que al final desembocan en problemas con la familia. Y el único que sabe todo lo que en realidad sucede en la casa y entre los parientes es el criado Calidoro, interpretado por Pepón Nieto, que lleva el peso de todo y sabe más de nosotros que nosotros mismos. 

¿Las mentiras son la base de la estabilidad social en el espectáculo?

En este caso en la obra se trata de mentir para sobrevivir y que todo siga igual. A veces pasan cosas que si las contamos pueden que hagamos todavía más daño que si nos las callamos, por eso los personajes se guardan algunas cosas para sí. 

¿Plauto se reconocería en esta versión de sus textos?

No se trata de una obra clásica al uso, sino que al final está modernizada. De hecho, puede que lo que más llame la atención sea la estética y el vestuario, propios de los años 60, empleados para representar esta comedia clásica. 

¿Qué es para usted lo mejor de participar en esta obra?

Todo lo que estoy aprendiendo. Además de que mi personaje tiene bastante peso a nivel global. También están mis compañeros, que son geniales y con los que me lo paso muy bien, porque al ser una comedia nos reímos un montón al final del día. 

¿Por qué ir a ver la “Comedia de las mentiras"?

Si quieren olvidarse un poco de la rutina de sus problemas, pasar un buen rato y reírse sin complejos, que vengan. Porque es cierto que, al final, la risa siempre hace mucha falta.

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