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El Día del fitness reunió a un centenar de participantes en la Praza Maior

El buen tiempo permitió a los monitores impartir las clases de taichi, yoga, bodycombat, zumba y street latin dance

+Deporte animó a los ourensanos a participar en diferentes modalidades deportivas con clases de taichi, yoga, bodycombat, zumba y street latin dance en la Praza Maior. 

A las 10,00 horas arrancaba el Día del Fitness con la clase de taichí, de la mano de José Gago, y a las 10,30 Sofía Pérez impartía la de yoga.  

Hilda Martínez fue una de ellas, que ya durante la clase de bodycombat se tomaba un respiro apoyada en las vallas que delimitaban la actividad. "Taichi me encantó, pero con bodycombat necesitaba descansar, porque es una clase muy intensa y además tengo una contractura en la espalda", comenta. Esta ourensana considera que con actividades como las que promueve La Región, se motiva a la ciudadanía "a mantener una vida sana y hacer deporte".

El cielo encapotado de primera hora de la mañana hizo dudar a los participantes, que se fueron animando conforme se disipaban las nubes. Noé Seara fue el monitor encargado de la clase de bodycombat. "Las mujeres siempre se apuntan a estas actividades, eso que el bodycombat es más para hombres, pero las mujeres siempre están ahí, en primera fila", comentó el monitor de BeOne.
Tras esta modalidad, a las 11,30 horas, llegó el turno del zumba. Las instrucciones de Pablo González, Yenina Alonso y Sara Fernández reunieron a un centenar de personas, e incluso levantaron a la gente que tomaba su consumición en las terrazas de la plaza. 

Saleta Vázquez celebraba junto a cinco compañeras más la despedida de soltera de su amiga Iria. "No teníamos ni idea de que había esto -por las actividades del Día del Fitness-, pero la música nos llamó la atención y nos apuntamos", comenta mientras trata de arrastrar a todo el grupo, que desayunaba en la terraza. "Ourense nos está encantando, y como una boda lleva a otra, en la próxima despedida volveremos", se ríen las seis pontevedresas.

Daniel Pérez es de los pocos hombres que se animaron con la actividad. Ya durante la clase de street latin dance, de Hugo Alonso, comenta, entre risas: "Somos una expecie en extinción".

Le acompañan sus sobrinas de 14 y 5 años, a las que trata de inculcar la pasión por el deporte. "Siempre vengo con mi tío a estas cosas, porque me gusta hacer deporte y pasármelo bien con el", comenta la mayor. 

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