El Observatorio Económico Provincial muestra un aumento de los afiliados a la Seguridad Social por primera vez en siete años
La provincia reafirma su disposición de salir de la crisis. Si a mediados de este año los datos arrojaban un descenso del paro en las 12 comarcas ourensanas, a esta estadística se le suma el crecimiento interanual del número de afiliados a la Seguridad Social en la provincia, algo que no se producía desde hace siete años. Éstas son las principales conclusiones que extrae el quinto informe del Observatorio Económico Ourensán, el estudio económico que elaboran la Diputación y el Inorde.
Tras un 2013 donde el número de cotizantes en la provincia había tocado fondo, la recuperación en el presente año se ha hecho especialmente palpable en este segundo semestre, donde se ha pasado de dos a 11 comarcas que han experimentado un aumento de los afiliados a la Seguridad Social; tan sólo Terra de Caldelas es la excepción. A nivel municipal, 54 concellos aumentaron su número de cotizantes -en marzo eran 25-, mientras que uno se mantuvo constante y 37 descendieron. De este modo, Ourense ha recuperado el segundo puesto entre las provincias gallegas con menor pérdida de afiliaciones desde 2007, en detrimento de Lugo.
En cuanto al paro, la provincia volvió a experimentar por segunda vez desde el comienzo de la crisis un descenso generalizado del desempleo, que representa una tasa interanual de un 9% menos, cuando hace justo un año ésta era de un 1,1%. Las comarcas de A Baixa Limia, Terra de Celanova y Valdeorras presentan una bajada que supera el 15%, mientras que en A Limia y O Ribeiro sobrepasan el 10% menos de paro. A nivel concellos, 82 del total de 92 tienen menos parados que hace un año, y en 40 de estos municipios el ritmo de reducción supera el 10%.
Este quinto informe provincial, coordinado por el profesor de la Universidade de Vigo José María Chamorro, presentó como principal novedad un análisis de la situación de los sectores industrial, tecnológico y servicios en las distintas comarcas de la provincia que, entre sus resultados, muestra una pérdida del protagonismo que ostentaba la comarca de Ourense. La capital y sus concellos circundantes continúan representando más de la mitad de la actividad en estos tres ámbitos, pero han experimentado en el último año un descenso en la creación de empleo, frente al aumento de la mayor parte de las comarcas del rural.
El sector tecnológico experimentó un aumento de actividad en todas las comarcas, a excepción de Ourense y Viana, con un 12% y un 14,3% menos, respectivamente. Destaca el crecimiento de A Baixa Limia en este ámbito, que alcanza un volumen anual de un 114,3% más.
En el sector industrial no se han manifestado grandes cambios en la actividad comarcal, a excepción del 42,1% de aumento en Terra de Caldelas. El crecimiento en un 36% del número de trabajadores en el ámbito de la maquinaria, del 13,6% en la alimentación y del 2,3% en la metalurgia permitieron equilibrar la actividad industrial en general.
Sólo Ourense ha sido la única comarca que se ha debilitado en el sector servicios este último año, aunque concentra un 46,2% de su actividad en el comercio y la reparación de vehículos. El crecimiento se produjo en todos los ámbitos del sector terciario, a excepción de la información, que decayó un 1,1% en un año.
