La Cruz Roja lleva a cabo un programa de acogida para niños con problemas familiares y Os Bolechas ayudan a dar a conocer el proyecto entre las familias que quieran proporcionar un nuevo hogar
Un autobús londinense y un Cuatro Latas aparcados en el Parque Barbaña tenía todos ingredientes para que el momento se convirtiera en una reunión de automóviles "vintage". Aunque si a ello le sumamos el "ruxerruxe" de la música de Os Bolechas ya todo volvió a ser lo que parecía.
La popular serie de dibujos animados hizo parada en Ourense racias a su particular gira (a lo Rolling Stone), en la que promociona el programa "Familia Acolledora" que lleva a cabo la Cruz Roja con la colaboración de la Consellería de Traballo e Benestar.
Alrededor de veinticinco chavales, calados en sus viseras, se subieron al autobús para participar en los juegos y los talleres de dibujo programados por la organización. Dentro del vehículo, dividido en una ludoteca y una biblioteca, seis monitores animaron a los niños a dar rienda suelta a su creatividad.
A la presentación de la campaña, acudió la presidenta provincial de la Cruz Roja Ourense, Teresa Rodríguez, para destacar la colaboración con la Xunta de Galicia y hacer un llamamiento a las familias que quieran acoger, que no adoptar, a niños con circunstancias familiares complejas. José Selas, jefe territorial de Traballo e Benestar, señaló la colaboración del gobierno autonómico en el proyecto, que está activo desde 1996, y cuenta con una dotación presupuestaria de 300.000 euros para el presente año.
Actualmente, 17 niños de toda la provincia están situación de acogida y 40 familias están dispuestas a proporcionarles un hogar.
La campaña "Os Bolechas Familia Acolledora" tiene como objetivo dar a conocer la labor de la Cruz Roja en materia familiar. La dirección provincial de la organización busca que más familias muestren su interés por la acogida. La premisa principal es no tener voluntad de adoptar, puesto que los niños estarán en todo momento en contacto con sus familias biológicas.
La Cruz Roja tutela el proceso de selección. Equipos de psicólogos y trabajadores sociales realizan entrevistas y visitas a domicilios para estudiar el entorno en el que se desarrollará el acogimiento. Todo para facilitar la adaptación del niño a su nuevo entorno. Por último, se formaliza un contrato con Benestar para formalizar las obligaciones y los derechos de cada parte.
