Las librerías de la ciudad han registrado durante los meses de mayo, junio y julio un incremento medio del seis por ciento en la venta de libros. Desde el inicio de la crisis económica, este es el primer verano que no decae.
Que el sector comercial del libro no está viviendo su momento más glorioso, es un hecho. Pero la tendencia podría estar cambiando. Por primera vez desde el inicio de la crisis económica, el verano no está marcado por la caída del número ventas en las librerías de la ciudad y, aunque todavía queda mucho por hacer, el último trimestre ha registrado un incremento de alrededor del seis por ciento, respecto del periodo anterior.
El presidente de la asociación de Libreros de Ourense, José Manuel García Mosquera, destaca que desde el día 23 de abril, Día Internacional del Libro, las ventas han ido in crescendo. "Lo normal es que ese día los clientes compren un libro, pero este año se han dado casos de gente que se ha llevado dos, e incluso tres", apunta García. Los meses de mayo, junio y julio han seguido la misma estela, sobre todo éste último, "porque a la gente le gusta mucho leer cuando está de vacaciones, es otro modo de relajarse", añade el portavoz del colectivo. Durante estos meses, ha coincidido la publicación de varios títulos muy esperados. "En novela se llevan la palma 'La chica el tren' de Paula Hawkins y 'Grey' de E. L. James", explica María Ruiz, de la librería La Viuda.
García Mosquera prevé otra caída en el sector. "La primera quincena de agosto todavía ha sido buena, pero ahora los padres ya empiezan a pensar en los libros de texto y tratan de ahorrar por otras vías", dice. Pero la previsión para las navidades "es otro repunte de las ventas", añade.
LITERATURA INFANTIL
Además del clásico de la novela para adultos, que a pesar del reciente suave incremento "ha sido el género que más ha notado la gran caída", según la presidenta de la Federación de Libreiros de Galicia, Pilar Rodríguez, la literatura infantil también se sube al carro de lo más vendido, incluso más que otros años. "Los padres cada vez están más concienciados de que sus hijos tienen que leer y les compran libros para el verano", apunta García Mosquera.
Las guías turísticas también computan en la venta de libros y "es un clásico que nunca falla", dice el presidente. "Es verdad que la gente viaja menos y a destinos más cercanos, pero estas publicaciones son clásicos y nunca van a dejar de existir", añade. Por temática, los libros de manualidades son los que han registrado el despegue más destacable, como puede ser el punto de cruz.
La lectura en gallego continúa siendo el cajón olvidado de las librerías de la ciudad. "Tanto la oferta como el número de lectores es mucho menor", dice José Manuel García. "Además, la versión en castellano siempre sale antes y en la mayoría de los casos al lector no le gusta esperar", añade.
Pero, con todo, los libreros ourensanos empiezan a temer por las prácticas de descarga ilegal que, "aunque aún no está a la orden del día", según García Mosquera, "harán desaparecer las publicaciones en papel, como empieza a ocurrir con la música", apunta Rodríguez.
