Tuvo 4.717 estudiantes matriculados en el pasado curso pero descarta la supresión de titulaciones por falta de matrículas
El pasado viernes 18 se cerró el primer plazo de matrícula para el acceso a las distintas titulaciones de las tres universidades gallegas. De este modo, se pone en marcha uno de los grandes medidores de la supervivencia de los campus, ya que la legislación autonómica obliga a los centros educativos a suprimir los estudios con menos de 45 alumnos de nuevo ingreso.
El Campus de Ourense pierde paulatinamente matrículas en cada curso, pero dice el vicerrector que esquiva la alarma, al menos de momento, aunque, a juzgar por la evolución de las matrículas, ha perdido cerca de 3.000 alumnos desde el curso 1999/2000. Es una evolución similar a la del Campus de Lugo, dependiente de la Universidad de Santiago, que llegó a tener más de 10.000 matriculados en el año 2000 pero que ya eran sólo 4.500 el curso pasado.
Con todo, los 4.717 alumnos de Ourense que se matricularon en el curso académico recién finalizado son una cifra que carga de confianza al vicerrector ourensano, Virxilio Rodríguez, que destaca que "a aposta polos graos que se están impartindo aquí está a dar os seus froitos".
El vicerrector aporta varias razones a la situación del Campus de Ourense, entre las que se encuentra la buena implantación del Plan Bolonia en 2009 o su "integración na cidade", algo a lo que da especial importancia, ya que "os alumnos que son do propio Concello ven moi favorable o aforro económico que lles supón estudar aquí". A este factor se le añade la circunstancia de que los seis centros del Campus ourensano "representan a todos os ámbitos de coñecemento", una variedad que "reforza o seu atractivo". Por último, elogia el nivel docente e investigador de todas las facultades, a las que defiende como "moi asentadas".
La evolución
Históricamente, el Campus vivió un hito estadístico en el curso 1999/00, cuando su volumen de matriculados llegó a alcanzar los 7.575 alumnos, una circunstancia "xeralizada en toda Galicia" que se debió a cuestiones demográficas. La progresiva caída de población tuvo su reflejo en el descenso de matrículas de los años siguientes. Destaca Rodríguez que la llegada de Bolonia supuso "un punto de inflexión" en el que el Campus inició su actual constancia. En el curso 2009/10, su cifra de alumnos fue de 4.875, número que ha variado a la baja en el último curso, con 158 menos.
Evidentemente, las cifras no son uniformes de una titulación a otra. Al contextualizar la norma que fija el mínimo de nuevos alumnos con el Campus ourensano, las miradas se centran en las carreras de Ciencias, azotadas por la problemática del escaso alumnado los últimos años.
A falta de emitirse los datos oficiales de este primer plazo, la Facultade de Ciencias cuenta con la ventaja de tener una oferta actual de grados -Ciencias Ambientales, Ciencia y Tecnología de los Alimentos e Ingeniería Agraria- orientada hacia "el campo agroalimentario-ambiental", señala el decano, Pedro Araújo. Esto se traduce en que la facultad prevé aprobar el próximo día 28 -fecha en la que se abre el segundo plazo de matrícula- la integración de asignaturas comunes para varias de estas titulaciones, en virtud de un decreto autonómico, con el que "se transversalizarán los grados y se presentará una oferta inicial común para todos ellos que evitará el problema de la matrícula".
El propio Virxilio Rodríguez destaca que "ata o momento non temos preocupación por ningunha titulación", y destacó que "en Ciencias hai tres graos que veñenen funcionando ben". El vicerrector se refirió en concreto al caso de Ciencias Ambientales, asegurando que "ten moita demanda" y garantizando que la tendrán en futuro, "xa que é un grao punteiro neste Campus, sobre todo a partir da liña estratéxica que nos marcamos co Campus da Auga".
