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Crecen en 38 kilómetros las áreas ourensanas inundables

zonas inundables Ourense.
photo_camera Una de las últimas crecidas del río Arnoia en Baños de Molgas, una de las zonas inundables.

Hay 92 zonas con riesgo de anegamiento en la provincia, con A Limia y el área metropolitana en cabeza

La provincia de Ourense aumentará en 38 kilómetros sus áreas con riesgo potencial de sufrir inundaciones en caso de lluvias o crecidas de los ríos, según recoge la propuesta final de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS), que será aprobada una vez que se acabe el plazo de exposición pública. La acotación de estas zonas inundables sirve para atenuar las posibles consecuencias de los anegamientos y tiene una incidencia especial para la construcción de edificios y para la ordenación urbanística.

En total, Ourense tendrá 161 kilómetros distribuidos en 92 áreas calificadas como inundables. Eso si no se modifica la propuesta realizada por la CHMS, que está en información pública hasta el 22 de diciembre. Es la provincia que más crece en kilómetros potencialmente anegables en este modificación de los mapas –la primera que se hace desde 2011–, ya que aumenta en 38 kilómetros, frente a los 17 que crece Lugo y los 5 de Pontevedra.

Ourense es la segunda provincia, de las cinco que forman parte de la demarcación hidrográfica, que más kilómetros susceptibles de ser inundados tiene. Solo Lugo, con 218, la supera.


 Por comarcas 


En un análisis por comarcas, la llanura de A Limia se lleva la palma, con un total de 33,72 kilómetros, seguida por la ciudad, con 33,45 km y Valdeorras, con 32,41. Más atrás se quedan O Ribeiro, con 28,72 km y Arnuide, con 14,42 km. La CHMS realiza con su nueva zonificación de áreas potencialmente inundables una modificación de la que se había aprobado en diciembre de 2011. Lo más notable es el incremento de kilómetros, que se debe a la incorporación de nuevos tramos.

Así, se incorporan trayectos como la ribera del río Miño entre Francelos y Ribadavia, el Rego do Muíño a su paso por Laxas (O Irixo), el río Viñao entre A Ponte y As Laxas y el entorno del río Brul a su paso por Francelos (Ribadavia).

En la ciudad y su área metropolitana, se incorporan más de cinco kilómetros de nuevas áreas inundables. Son más de tres kilómetros del regato dos Muíños entre A Valenzá y Ourense, medio kilómetro del río Búbal entre A Granxa (Carballedo) y Casdevil (A Peroxa), el río Sil desde O Torrón a Os Peartes, y un kilómetro y medio desde este último núcleo hacia el norte, siguiendo el curso del río Miño hacia A Granxa (Carballedo).

En la zona de Allariz-Celanova, se añaden tres nuevos tramos que pueden recibir inundaciones. Uno afecta al núcleo urbano de Celanova, en el entorno del río Sampil, otro es el rego da Amunia en Moreiriñas (A Bola) y otro es el río do Porto, a su paso por Outeiro (también en A Bola). Otro de los municipios que incorpora una importante área inundable es Baños de Molgas, que al kilómetro del río Arnoia a su paso por el centro urbano, añade ahora el entorno del río Maceda.

Ya en Valdeorras, se propone un nuevo tramo en Carballeda, en el entorno del río Riodolas; otro de casi un kilómetro en el Regueiro de Mourelas en Viloira (O Barco) hasta desembocar en el río Sil; y se declarará como inundable casi 4 kilómetros a su paso por Carballeda.

Más al sur, se propone también un nuevo tramo en el río Lobios, a su paso por el núcleo urbano homónimo, con una longitud de 2,3 kilómetros; y dos nuevos tramos en el sistema del Limia: uno en el río Freixo en Sarreaus y otro en el río do Bouzo en As Casas da Veiga (Vilar de Santos).


Restricciones que afectan a los planes de urbanismo


Para la elaboración de este nuevo mapa de zonas potencialmente inundables, se estudiaron las  consecuencias adversas de los episodios históricos de inundación, valorando distintas categorías de daño: fallecidos, heridos, viviendas, industria, evacuados, infraestructura de transporte, suministro eléctrico, riegos o cultivos. Estos se agruparon por término municipal, sumando los valores globales de daño obtenidos en cada uno de ellos. De esta forma, se identificaron las áreas con mayores consecuencias adversas por inundaciones históricas.

La nueva acotación de zonas inundables tiene importancia, debido a que el Plan Xeral de Ordenación Municipal del Concello de Ourense tendrá que regirse por ella. Así, las construcciones que se realicen en zonas inundables deben ser, en la medida de lo posible, compatibles con las inundaciones, y se recogen limitaciones para cierto tipo de infraestructuras.

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