Protagonista del espectáculo "Os 80", el sábado en el Auditorio
Los años 80 son una época que marcaron, sin duda, a varias generaciones. Y partiendo de ellos como inspiración, el Mago Teto ha creado un espectáculo único, con magia, música y sorpresas, que mostrará a los ourensanos el próximo sábado, día 19, en el Auditorio, a las 20,30 horas.
¿Por qué los años 80?
La inspiración me vino en Perú, en un viaje a los Andes. Yo siempre viajo con música, que es mi inspiración, y escuchando una canción de Tino Casal, entonces pensé que podía quedar bonito, no para un espectáculo entero, sino para un sketch, y me puse a escribir. Al poco ya me dí cuenta que daba para un espectáculo, y ya nos pusimos a trabajar y catorce meses después aquí estamos.
¿Qué verán los ourensanos?
No va a ser el típico espectáculo de magia, tiene una temática muy concreta, estaré acompañado de tres músicos en directo, dos actores y un técnico de luces, parte fundamental del elenco de la compañía. Consta de 13 sketches mágico-comicos, donde habrá números con concursos de televisión, música de los años 80, elementos típicos de aquella época, y un poco todas las especialidades de la magia: desde escapismo hasta cortar a la gente, con números de mentalismo y trucos de carta.
¿Qué es lo más difícil para crear un espectáculo de magia?
La idea, lo más complicado es tener una idea que sea interesante y emocionante para el espectador. Con esta temática creo que acertamos, porque le resulta cercana al público, tanto para los que vivieron la época como para los más pequeños.
¿La magia es la hermana más pobre de las artes escénicas?
Siempre estamos ahí un poco olvidados, pero es curioso porque el cine lo inventaron los magos para hacer número. Lo bonito de la magia con respecto a otras artes es que es para todos los públicos, pueden ir niños desde 4 años hasta 150. Con respecto a otras artes, yo intento siempre fusionar el espectáculo, hay actores, música, intento jugar con todas esas artes. En este trabajo también le doy mucha importancia a la escenografía.
¿Resulta difícil sorprender a la gente en estos tiempos?
Lo difícil ahora es que la gente vaya al teatro. Una vez que van, creo que es fácil sorprenderlos. Ese es nuestro trabajo, y hay que estar siempre evolucionando para ofrecer un buen trabajo al público que acude.
¿Cómo se forma un mago?
No soy el mejor para dar consejos, pero yo estudio mucho; saber de dónde vienen las cosas, qué hicieron, es un trabajo constante de investigación. Y después está el contacto con otros magos del mundo, que somos algo así como una secta.
¿Quedan trucos por inventar?
Supongo que quedan muchos por inventar, uno que sería bonito sería la desaparición de las armas, estamos investigando pero aún no sabemos cómo hacerlo.
