Los votos del PP sacaron también adelante la relación de puestos de trabajo y el plan de ordenación de recursos humanos
Con los votos favorables del grupo mayoritario del PP, la Diputación de Ourense aprobó inicialmente sus presupuestos para 2015 en la sesión plenaria celebrada ayer, un debate que por primera en la historia de la institución se desarrolla con gran antelación, en el mes de octubre, y en los que, también por primera vez, las inversiones son las más elevadas -al crecer un 30%- y el gasto de personal más reducido, al caer el número de trabajadores, que costarán el próximo año 26,8 millones de euros. Las cuentas del ente provincial, que ya habían sido anunciadas la pasada semana por su presidente, Manuel Baltar, presentan un incremento del 2,65% respecto a las del presente ejercicio.
Las previsiones económicas de la Diputación se aprobaron con los votos del PP en solitario pues se toparon con el rechazo de la oposi- ción, que centró sus reproches en la ausencia de una partida prevista para cubrir los 5,2 millones de euros correspondientes al reintegro de los fondos europeos para la instalación de un centenar de depuradoras en la provincia -cuyo reintegro a Hacienda fue sus- pendido cautelarmente hasta la resolución judicial definitiva, como adelantó La Región-.
Así, el portavoz del BNG, Leopoldo Rodríguez Puga, criticó unas cuentas que calificó de "patraña" y acusó a Baltar de "omitir deliberadamente" esta cifra. Pero el portavoz del PP, Plácido Álvarez, criticó a la oposición por querer incluir esta cantidad dentro de los presupuestos "para descolocar ao goberno provincial". Y dijo: "A Deputación fixo os deberes, e o suspenso do reintegro é a proba, polo que non hai obriga de incluír esa cantidade nos orzamentos".
Rodríguez Puga criticó que las cifras para 2015 "non resolven os déficits nas infraestruturas nin dinamizan os sectores productivos da provincia", a lo que añadió "inconcrecións", desde su punto de vista, al plan de empleo juvenil, para el que se destinará más de un millón de euros.
Ignacio Gómez, portavoz del PSdeG, acusó a la Diputación de "superar o límite de gasto non financieiro calculado". Pero Álvarez defendió que los presupuestos están "elaborados dende o rigor e a prudencia. Permítennos lanzar unha mensaxe de optimismo, dado que medran considerablemente, confirmando a tendencia de recuperación na facenda provincial".
El portavoz popular defendió dos de las grandes novedades de las cuentas: 1,5 millones que la institución destinará al Plan Termal y la creación de una Agencia de la Energía y el Medio Ambiente, identificando a la primera de ellas como "a máxima prioridade do Goberno provincial" y a la segunda como "un proxecto ambicioso" que permitirá a los concellos la negociación de las tarifas eléctricas.
Desde la oposición, Leopoldo Rodríguez acusó a la Diputación de utilizar ambas medidas para privatizar servicios y favorecer a empresas afines al PP. Gómez manifestó que Manuel Baltar "vive nunha realidade paralela".
"Agradézolles as súas suxerencias e aportacións aos orzamentos: este folio en branco", sentenció con ironía Baltar justo antes de la votación. Y les recordó que tienen ahora un mes de plazo para presentar alegaciones. Antes, el presidente destacó el incremento de la inversión y la reducción del personal, un empeño de su gobierno desde que accedió a la presidencia, en febrero de 2012.
También se aprobó gracias a la mayoría popular la relación de puestos de trabajo y el Plan de ordenación de recursos humanos para 2015. PSdeG y BNG centraron sus reproches hacia el establecimiento de la libre designación de los puestos de responsabilidad, como jefes de servicio o directores de centros dependientes de la institución, acusando a Baltar de "pouco democrático" ante la "elección a dedo" de estos cargos.
Rodríguez Puga señaló al presi- dente de la Diputación como el au- tor de un "axuste de contas contra os que traizoaron a esta casa", mientras que Ignacio Gómez reprochó que estos reglamentos no hubiesen pasado por las comisiones informativas. Plácido Álvarez aseguró que la relación de puestos de trabajo "garante unha reducción de gasto e unha maior eficiencia", y defendió que la libre designación corresponde a plazas "que están cubertas nestes intres". "É unha medida futurible para cando haxa vacante", explicó el portavoz popular.
