La descoordinación entre políticos y técnicos dificulta los procesos para las concesiones municipales
Un nuevo vaivén en la política de concesiones del Concello de Ourense. Las dudas del gobierno municipal han frenado la colocación de los cuatro mupis digitales contemplados en el contrato de explotación publicitaria del mobiliario urbano municipal, adjudicado en octubre de 2016 a PM Trans Europe, que abona un canon anual de 110.000 euros. La adjudicataria había comenzado a principios de este mes la obra para instalar los soportes en la avenida Pardo de Cela, en la rúa Sáenz Díez y en la Alameda do Bispo Cesáreo, estando pendiente todavía la rúa Curros Enríquez. Con los trabajos avanzados, que ya permiten observar los pivotes que sostendrán las pantallas–en la Alameda aún están las vallas de obras–, en el Concello surgen ahora dudas sobre su idoneidad para esos espacios y el impacto visual que podría generar. Todo esto sucede después de que ya en enero el gobierno local hubiese dado luz verde a un cambio de las ubicaciones inicialmente previstas para los mupis digitales.
Rosario de dificultades
Los problemas en esta concesión se unen así a otros en diferentes contratos explotados por empresas y a las dificultades para renovar otros en precario desde hace años como el transporte urbano o el mantenimiento semafórico.
En lo que va de mandato, los retrasos en la tramitación de proyectos como la rehabilitación de la Plaza de Abastos o los diferentes concursos que han quedado desiertos, como la adjudicación de la gestión del mercado de A Ponte, ejemplifican también las dificultades para poner al día la gestión municipal en esta área.
La concesionaria, a la espera
Las dudas del Concello han llevado a la empresa responsable de la explotación publicitaria del mobiliario urbano a frenar cualquier operación hasta saber si puede seguir adelante o el Concello vuelve a decidir un cambio. "Todavía no sabemos nada, estamos a la espera", dicen en PM Trans Europe.
Preocupación por la "seguridad del tráfico"
Un agente de la Policía Local de Ourense ha presentado un escrito por registro en el Concello en el que alerta de que los mupis digitales supondrán, en su opinión, un "atentado contra la seguridad del tráfico, ya que su orientación pone en peligro la vida de las personas".
En este sentido, el agente urge al gobierno municipal a no permitir la instalación de estas pantallas, asegurando que ya en el año 2008 hubo informes desfavorables a elementos de similares características. De llevarse a cabo, este ciudadano asegura que presentará una denuncia contra el Concello de Ourense.
Por esta razón, este agente de la Policía Local solicita la retirada de estos soportes publicitariosde las ubicaciones elegidas por el gobierno muncipal o, "en su defecto, que esas no estén orientadas a la circulación de los vehículos".
