Aprovecharon un descuido del hombre para echarle un medicamento en el café para causarle somnolencia y luego hacerse con sus pertenencias
María José M.L., María José T.V. y Arturo D.B. fueron condenados a un año y nueve meses de prisión por un curioso robo con violencia en casa habitada: durmieron a un conocido para poder desvalijar a sus anchas la casa a la que fueron convidados a tomar un café. Ayer se declararon autores del robo y aceptaron la pena propuesta por la fiscal tras rebajarle la petición inicial (cuatro años de prisión para cada uno).
Los hechos que llegaron ayer a juicio y que se saldaron con una sentencia de conformidad ocurrieron el 24 de abril de 2014 sobre las ocho y media de la tarde. Los tres acusados se presentaron en el domicilio de D.G.C., situado en Becoña de Arriba, en donde el anfitrión les ofreció un café. Pero, durante un descuido del dueño de la casa, los acusados le echaron un medicamento, que no pudo ser identificado, en su bebida para causarle somnolencia.
Toda vez que D.G.C. se quedó dormido, los inculpados se apropiaron de distintos efectos del domicilio: botellas de güisqui, brandy, licores, una chimenea eléctrica, un deshumidificador, una báscula y diversas prendas de ropa. Los efectos fueron valorados en 1.044 euros. En Vigo, vendieron la chimenea y el deshumidificador en un local comercial por 30 euros.
