La pieza audiovisual, dirigida por Iván Mena, fue presentada en el OUFF y atrae ahora la mirada de EEUU
El premiado corto 'A través del espejo', dirigido, producido y escrito por el bilbaíno Iván Mena Tinoco, con protagonista gallega, la actriz Ledicia Sola, y que hoy se proyecta en el Festival Internacional de Cine de Gijón, ha despertado ya la atención de productores de Estados Unidos, atraídos por el relato.
El artífice de esta historia gráfica de superación personal, quien todavía no se atreve a desvelar detalles, por la necesaria prudencia, señala en una entrevista que escribe y estudia todas las posibilidades hasta dar con el "compañero de viaje idóneo" para una aventura que recién acaba de empezar.
Después de peregrinar por medio mundo y de un palmarés conformado por el reconocimiento al Mejor Cortometraje en el International Film Festival Manhattan de Nueva York 2014, la Mención de Honor del Jurado en Palm Springs ShortFest 2014 o la Mención de Honor del Jurado en Porto7, 'A través del espejo' concurre ahora a la competición oficial del Festival Internacional de Cine de Gijón 2014 (FICXixón).
Mena, artífice de esta narración audiovisual, que también visitó el Festival de Cine Internacional de Ourense (Ouff), comenta que el objetivo era incidir en la capacidad de los seres humanos de sobreponerse a períodos de dolor emocional y a situaciones adversas saliendo, además, fortalecidos.
Un talento que en Psicología se conoce con el nombre de resiliencia y que los expertos consideran como un factor que proporciona un mayor equilibrio emocional, aunque está más a flor de piel en los niños, dado que los adultos lo pierden con el paso del tiempo.
"Me interesaba mostrar de qué manera se puede recuperar la inocencia y la importancia de los sueños en nuestro día a día. Cómo aprender a ver la realidad, cómo redescubrirla", puntualiza Mena.
En 'A través del Espejo' Mena toma las riendas del que, hasta ahora, es su proyecto más personal y con el que -confiesa- no se puede "sentir más identificado".
"Es un compromiso con el espectador, hablar de cosas que preocupan, historias que son de ellos. A la hora de trabajar no puedes prescindir de esa emoción y de esa pasión", afirma.
Así, en este trabajo, donde reina la espectacularidad, la aventura, el positivismo y las tecnologías más innovadoras, Mena brinda la oportunidad de acercarse a la realidad a través de la fantasía, creando una forma de narrar que lleva a algo, en lugar de utilizar la mitificada y tradicional fórmula emocional e infantil del 'Érase una vez'.
"Lo que hice fue crear una especie de lenguaje de thriller que va desde la razón, para llegar a la emoción", detalla el constructor de este proyecto.
La encargada de inmiscuir al público en este singular viaje entre la realidad y la ilusión es la ourensana Ledicia Sola, que encarna a Alicia, una mujer de treinta años que cuando despierta en lo alto de un acantilado no recuerda nada y solamente es capaz de percibir unas estrellas fugaces que surcan por el firmamento hasta convertirse en trozos de espejo.
Un escenario lluvioso y solitario, una niña hospitalizada que lee fragmentos del tradicional cuento para niños 'Alicia en el país de las maravillas' y una criatura surgida de la más profunda oscuridad serán las piezas que complementan el acertijo que pondrá a prueba la capacidad de la propia protagonista para sobrevivir al país de las maravillas antes de las seis de la tarde, la hora mágica y a la vez trágica en la que ocurrirán cosas terribles.
Aunque el futuro es esperanzador y prometedor, los inicios nunca son "caminos de rosas", y Mena, que se describe como "un adicto al cine", puede ser un buen ejemplo de ello.
Tres años de Ingeniería Industrial fueron suficiente prueba para que este bilbaíno se diese cuenta de que el desarrollo, la mejora, la implantación y la evolución de sistemas integrados que quería llevar a la práctica debían estar ligados al mundo cinematográfico.
Un hecho que se palpa en este trabajo, una de las primeras producciones cinematográficas europeas post-producida al completo en 4K, un estándar emergente para la resolución en cine digital de aproximadamente 4.000 píxeles.
Mena, que posee un perfil heterogéneo, ya que además de cineasta es director de publicidad, vídeos musicales y fashion shows, lamenta que, a pesar de que se hacen productos "muy interesantes", el futuro en este mundillo no sea tan claro y tangible, porque él mismo tiene dudas de que se esté "construyendo algo".
"Hace tres años tenía la sensación de que se podía conseguir -vivir del cine-, pero ahora, a pesar de seguir luchando por ello, no tengo claro el fin", observa.
Amante de la serie Breaking Bad, Mena, que empezó como editor y supervisor de efectos en 'Catarsis' (2000), sigue creyendo en la profesión, por lo que continuará "persiguiendo un sueño", avisa.
