Las marcas foráneas dominan también por superficie de venta en el tramo de la ciudad con mayor actividad mercantil.
La calle del Paseo sigue siendo la zona cero del comercio de Ourense, pero sus genes ya no llevan identidad local. El cambio de hábitos, el coste del metro cuadrado y sobre todo el fracaso del relevo generacional han sido letales para la supervivencia de tiendas que eran propiedad de ourensanos. Entre la esquina de la calle San Miguel y el cruce con el Parque de San Lázaro hay en estos momentos 65 establecimientos a pie de calle (libres y ocupados),con fachada al Paseo, sin contar entreplantas o galerías comerciales. Sin embargo, 27 están en manos de comerciantes locales, lo que representa un 41% sobre el total. Y si la comparativa es sobre superficie de venta en vez de sobre el número de locales, la diferencia es mayor porque las tiendas ourensanas son mucho más pequeñas
Según datos de la Xunta, en Ourense perviven 3.990 establecimientos comerciales, con una superficie de 409.000 metros cuadrados, lo que supone un 10,35% de los locales gallegos con el 10,77% de la sala de ventas. Por lo tanto, un 1,6% de los comercios están concentrados en el lugar con más movimiento de clientes. Son locales "privilegiados", pero menos de la mitad tiene denominación de origen.
Sobre las razones que contribuyen a esa especie de colonización hay dos fundamentalmente. La primera: "Los comerciantes ourensanos no pueden pagar los precios que los propios ourensanos piden por sus locales vacíos". Así lo expresa un agente inmobiliario especializado en transacciones de este tipo. La segunda razón es el tránsito del negocio de padres a hijos y la falta de un protocolo que lo facilite.
Luis Martínez, que está al frente de Jesús, Delfín y María, Calzados Delfín y Sterling (dos de ellos en el Paseo), reconoce ser "un afortunado" por conseguir que sus hijos se hayan puesto al frente de los negocios familiares. Y es que en España el 70% de las empresas familiares no superan el primer relevo y el 15% no llegará al segundo, un dato que supera en 10 puntos la media europea y 25 o 30 por encima de la americana.
Pese a ello, al Paseo llegan nuevos colonos locales. Rubén Pena abrió en junio del 2013 la tienda Level One tras una primera etapa en la calle Curros Enríquez: "La calle del Paseo siempre será la calle del Paseo y a nosotros nos va mucho mejor, estamos mejor posicionados y ganamos en rentabilidad". Históricos comerciantes de la calle opinan algo parecido. Jorge Cachaldora regenta la peluquería de su mismo nombre y que su madre abrió hace 59 años. Él, como sus colegas, ve en el relevo generacional parte de las razones por las que las enseñas de fuera han tomado la delantera. Pese a ello transmite optimismo al señalar que "a esta calle se la ve con más movimiento que hace tres años", una imagen que también perciben Luis y Rubén.
Son tres ejemplos de negocios que comparten la milla de oro comercial de la ciudad, un espacio que ha sido tomado por enseñas de fuera, sobre todo bajo la fórmula de franquicias, que crece a una media anual del 2,5% en España y que aún no ha tocado techo.
Los precios en el entorno han caído un 30% desde el estallido de la crisis
La crisis ha ido echando la persiana a muchos establecimientos, pero la calle del Paseo ha resistido mejor que otras zonas, precisamente por su carácter de trama urbana plenamente comercial. Quedan, efectivamente, locales cerrados aunque la mayoría lo están porque sus propietarios piden sumas de dinero que los demandantes no están dispuestos a pagar. Según los cálculos que hacen profesionales del sector, la caída de precio está en torno a un 30% desde el 2007 a esta parte.
Entre los intermediarios de este tipo de operaciones se da por amortizada la presencia de comerciantes locales porque es inasumible el abono de algunas rentas mensuales para mantener los negocios, de ahí que sean franquicias o tiendas monomarca las interesadas por explotar este tipo de negocios. Según los datos que ofrece un muestreo sobre los alquileres que se pagan en esta calle, hay algunos datos reveladores. Por ejemplo, por la tienda que dejó hace ya años Springfield frente a Cortefiel los dueños piden en torno a 10.000 euros mensuales, una cifra que se aleja de las posibilidades de varias empresas que se han interesado por este local.
Movimientos
En los últimos meses se han producido varios movimientos importantes en la calle del Paseo. En Navidad abrió sus puertas la franquicia de complementos Aristocrazy, con el pago de una renta de 6.000 euros mensuales por una tienda que antiguamente ocupó la perfumería IF. Justo enfrente, al lado de Geox, se negocia estos días un alquiler para una nueva franquicia en sustitución de Bijou que también venderá complementos. Por último la tienda de Bimba&Lola puede ser pronto vecina del Paseo en sustitución del local del parque.
Las empresas que más están pagando por locales en el Paseo, según fuentes del sector, están la multinacional H&M, que ocupa dos plantas en un edificio rehabilitado en las antiguas dependencias Tobaris; y Cortefiel, en el establecimiento que hace esquina con la calle Concordia. Son, aseguran las mismas fuentes, los alquileres más caros de toda la ciudad, muy alejados de los precios actuales de mercado, alejados de las posibilidades de la mayoría de arrendatarios y fruto de una negociación en épocas de bonanza.
Las nuevas marcas exigen estar en las “zonas calientes"
La clínica dental Dentix está a punto de desembarcar en Ourense y lo hará en los bajos que ocupó hasta hace unas semanas la tienda de alfombras Hermanos Barros, que pasó a Lamas Carbajal, en una propiedad que antes había ocupado la perfumería Maryan. Dentix posee centros en toda España y en su plan de expansión estaba Ourense, de tal forma que optó por la calle del Paseo, una de las denominadas "zonas calientes" que en la ciudad solo tiene esta calle y la de Santo Domingo.
Y es que las nuevas marcas piden a sus intermediarios que busquen zonas en las que los eventuales clientes pasen ante ellos a diario. Lógicamente ese requisito tiene un coste que en el caso de Dentix se eleva a los 6.500 euros mensuales, según fuentes conocedoras de la operación.
Pero esta no es la única enseña que podría recalar en el Paseo. La multinacional Tiger está dispuesta a llegar de inmediato. Esta firma está desarrollando un ambicioso plan de expansión desde que en el año 1995 naciese en Dinamarca y llegase a España en el año 2008. Ya tiene presencia en veinte países con mas de 260 tiendas en las que se venden varias clases de artículos de hogar con precios que van desde un euro hasta los 30 como máximo. La sociedad Tiger North Spain, S.L. es la que se encarga de los establecimientos gallegos y han previsto montar una tienda en el Paseo, previsiblemente en el antiguo local de Pórtico, aunque la operación no está cerrada. Otras opciones, igualmente céntricas, quedaron desechadas por los responsables de la marca hace pocas fechas.
