CRIMEN DE SESITA VECOÑA

Niega ser cooperadora en el crimen de su suegra en 2008

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photo_camera Momento en el que el furgón policial traslada a Comisaría desde los juzgados a Estela G., en imagen.

Los vecinos y familiares de Beariz sienten "alivio" al conocer la detención de la nuera de la ourensana 

El Juzgado de Instrucción 6 de Vigo, en funciones de guardia, decidió ayer prorrogar la detención de la viguesa Estela González para su traslado a la Audiencia Nacional, que decidirá sobre su extradición a Venezuela, país que ordenó su arresto, a través de una orden de Europol, por un presuntamente cooperar en el asesinato de su suegra en 2008 a manos de sicarios. La víctima, Sesita Vecoña Otero, de 62 años, natural de Magos- Beariz-, con negocios en Vigo y emigrada a Venezuela, murió al ser tiroteada en el hotel de su propiedad en Caracas. La justicia de Venezuela envió a uno de sus hijos a prisión acusado de ser el presunto autor intelectual del crimen y emitió una orden de arresto contra su mujer.

Fuentes policiales explicaron que agentes de la UDEV de Vigo se presentaron en el domicilio materno de la viguesa en Canido al recibir la orden de arresto, pero ella, según le informaron no se encontraba allí, sino en Francia, si bien se la esperaba para un periodo vacacional en la ciudad. Pese a detectarse la presencia de la mujer hace unos días en Vigo, fue ella quien llamó a Comisaría al conocer que la estaban buscando. Al ser informada, reconoció no saber de qué se trataba esa orden y negó cualquier vinculación con la causa por la que su marido, del que actualmente está divorciada, está en prisión.

Los vecinos de Beariz y familiares de Vecoña recibieron con sorpresa la noticia de la detención, al mismo tiempo que manifestaron sentirse aliviados teniendo en cuenta que ya se había dictado una orden de búsqueda del pasado 7 de junio. Fuentes cercanas a la empresaria asesinada declaraban que "sentimos alivio de que esté detenida porque lo que queremos es que se haga justicia". Sesita Vecoña era miembro de una extensa familia de la localidad de Magros, en Beariz, en donde en estas fechas disfrutan de las vacaciones cinco de sus hermanos. 

 ‘Siento dolor por mi madre, pero a la vez satisfacción por la justicia'

Las rencillas familiares comenzaron antes del crimen. Según explicó un hijo de la víctima, “mi madre y yo denunciamos a mi hermano y su mujer porque falsificaron un documento para quedarse con el patrimonio. Cuando un juez iba a descubrirlo, mi madre es asesinada”, explicaba. Según dijo, “a pesar de los problemas con mi hermano, y de que él está en prisión, sigue siendo mi familia. Lo ocurrido nos causa mucho dolor pero a la vez estamos satisfechos porque se haga justicia. Ella es, para nosotros, el auténtico cerebro de todo. Un crimen por dinero”.

La hermana, por su parte, residen-e en la ciudad, no podía reprimir el llanto. “Me da muchísima pena mi sobrino, ahora con sus dos padres presos. Él no tiene la culpa de nada y es de nuestra familia”. El crimen ocurrió en 2008, sin embargo, la Fiscalía de Venezuela ha mantenida abierta la investigación, a pesar de cerrarse policialmente.“Se critica mucho a este país, pero en el caso de mi madre, se ha peleado hasta el final para detener a todos y cada uno de los responsables, desde el que lo pensó, hasta el autor material y los intermediarios. Hay pruebas que la señalan a ella”, explicaba el hijo de la víctima, quien asegura que “ los propios sicarios delataron a los responsables del encargo”. La Policía de Venezuela detuvo a cuatro personas, el hijo de la víctima, un intermediario y dos sicarios.

  

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