Recorrió negocios del centro pero "el mal aspecto" del timador llamó la atención de un empresario
Manuel F.R. (49 años), toxicómano con antecedentes policiales, echó mano de la confianza que genera un conocido centro educativo de la ciudad y el deporte para articular un engaño con el que estafar a los negocios de la zona centro. Durante varios días, carpeta en mano, con documentos y hasta cartelería para inducir credibilidad entre sus potenciales víctimas, recorrió establecimientos comerciales del entorno de Maristas para pedir dinero en nombre del colegio con el pretexto de organizar un campeonato de fútbol sala.
Con esta excusa, llamó a la puerta de una academia de idiomas, una tienda de informática, una óptica y una peluquería. Y metido de lleno en el papel de gestor deportivo, hasta llegó a pedir presupuesto para 2.000 carteles. La artimaña consistía en dotar de folios, cuantos más mejor, al falso torneo para que resultara aparente.
Pero el aspecto físico del embaucador -poco saludable para actuar en nombre del deporte y desaliñado- llamó la atención del responsable de uno de los negocios que visitó, quien telefoneó al coordinador de actividades deportivas del colegio para pedir más información. "En este entorno todo el mundo nos pone cara porque es normal que tengan hijos escolarizados aquí", explica el director de Maristas, Fernando Ampudia. En esa conversación, se destapó todo. Nada más conocer la incidencia, el máximo responsable educativo lo puso en conocimiento de la delegación de Participación Ciudadana de la Comisaría.
"Este colegio nunca ha utilizado ese sistema para recaudar dinero, asegura el director, matizando que "no nos gusta que se utilice el nombre de Maristas para estafar a personas de buena voluntad". Ampudia, además, anima a todos los afectados a denunciar.
Por el momento, según confirmaron en la Comisaría de As Lagoas, hay dos denuncias -una óptica y una peluquería, que le entregaron 50 euros por negocio-, pero la policía cree que hay más damnificados. Hasta ahora, el delito que se le puede imputar es leve (no excede los 400 euros).
El supuesto timador fue localizado en las inmediaciones del colegio este miércoles tras la descripción aportada por la persona que dio la voz de alarma (un hombre de unos 50 años, canoso, gafas y ropa vieja). Los agentes de Seguridad Ciudadana lo identificaron y le requisaron 50 euros .
Manuel F.R. reconoció su artimaña pero con algún matiz. Según confesó, el dinero iba ser destinado para un torneo en A Carballeira pero utilizó el nombre de Maristas por el caché. La Policía cree que es mentira.
No es la primera vez que en nombre de un colegio el sospechoso, quien tiene antecedentes por estafa, robo, tráfico de drogas, entre otros delitos, pide dinero, según confirmaron fuentes policiales.
