El presidente gallego resta importancia al asunto porque "a única intencionalidade era recuperar un inmoble para o patrimonio da Comunidade"
La decisión del fiscal jefe, Florentino Delgado, de interponer una querella contra dos cargos de la Xunta al entender que cometieron "un delito de coacciones inmobiliarias" para forzar el desalojo de los inquilinos del edificio número 1 de la avenida de La Habana provocó ayer un cruce de declaraciones entre el viceportavoz de En Marea, Antón Sánchez, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.
Sánchez criticó los "comportamentos mafiosos" del gobierno gallego y pidió "explicacións" a Feijóo "por actuar como o peor dos fondos voitre e que escenifica perfectamente o que significa para a Xunta as políticas de vivenda".
Posteriormente, Feijóo rechazó que se haya podido incurrir en un supuesto delito e incidió en que "a única intencionalidade era recuperar un inmoble para o patrimonio da Comunidade".
El presidente de la Xunta aseguró que "imos colaborar e estamos a disposición de calquera órgano xurisdiccional", remarcando que "non se trata de recuperar un inmoble para altos cargos, senón para o patrimonio, algo ben distinto".
