Reclama nueve años de prisión por asaltar un supermercado y un banco
La fiscal reclamó ayer nueve meses de prisión para José Manuel Yáñez Martínez por dos atracos muy seguidos en febrero de este mismo año con cuchillo. El primero que le imputa, el día 13, ocurrió en el Eroski de la calle Racanto da Mapoula, en el barrio de A Cuña . El segundo, dos días después, en la sucursal del banco Santander del número 43 de la avenida de Zamora.
En su informe final en el Juzgado de lo Penal 2, la acusación pública basó su petición de condena en varios indicios y pruebas, entre la que destacó la peculiar forma de caminar renqueante del inculpado y que, según recordó, lo delató ante la policía , además del nerviosismo exhibido en ambos robos con intimidación.
La fiscal también cree que la sudadera que apareció en el registro domiciliario le delata por la descripción aportada por la cajera del supermercado ("de color azul claro y con cordones blancos").
Tampoco pasó por alto el testimonio de un cliente del banco que declaró ayer, en la segunda sesión de la vista oral. Este último siguió al supuesto atracador hasta las obras del hospital al tiempo que llamaba a la policía. Poco después, los agentes detenían en ese lugar a José Manuel Yáñez.
Por su parte, la acusación particular en representación del supermercado se adhirió a la exposición de la fiscal , reclamando cinco años de prisión.
Para el letrado de la defensa, "los indicios son claramente insuficientes" para sostener la condena, sobre todo en el caso del atraco al supermercado. El ladrón también va enfundado en un plumífero de dos colores que no fue hallado en el registro. En cuanto al asalto al banco, adujo que en todo caso de trata de un robo en grado de tentativa y que no esgrimió el cuchillo.
También enfatizó el hecho de que la policía hizo encajar un modus operandi de perfil con el de una persona con antecedentes. La pena en caso de ser condenado no debería exceder a su juicio los dos años y nueve meses en aplicación de una atenuante muy cualificada de drogadicción.
‘No sé donde está el Eroski'
El acusado aprovechó su derecho a la última palabra para decirle a la jueza, entre otras cuestiones, que nunca acudía el barrio de A Cuña y que no sabía tal siquiera que hubiera supermercado.
En este último negocio, el asaltante se apoderó de 190 euros mientras que en la sucursal consiguió 100 euros en billetes y 160,36 euros en monedas.
