El inculpado, según la Policía Nacional, las abordaba sorpresivamente para arrebatarles el bolso
Juan Carlos G.P., de 52 años, se dedicó a asaltar a mujeres en la ciudad hasta que un hostelero se cruzó en su camino, según se describe en el atestado de la Policía Nacional con motivo de su detención el 22 de mayo del pasado año. Su especialidad, tal como hicieron constar, era abordar a las víctimas de forma sorpresiva para arrebatarles de un fuerte tiró el bolso. Si ofrecían resistencia, no dudaba en recurrir al uso de la fuerza y alguna de ellas resultó lesionada al caer al suelo.
La fiscal reclama para él una pena inicial de seis años y medio de prisión por un delito consumado de robo con violencia y otros dos en la modalidad de tentativa, además de multa por las lesiones leves de las denunciantes. El asunto se dilucidará en mayo en el Juzgado Penal 2.
El primer robo imputado ocurrió sobre la una de la madrugada del día 20 de mayo de 2018. D.T.A. se disponía a entrar en el portal de su casa de la calle Julio Prieto Nespereira cuando fue abordada por un hombre que le tiró del bolso. La acusación dice que el inculpado golpeó a la perjudicada en la mandíbula y le dio una patada en la pierna cuando trató de evitarlo. Además, se quedó sin la documentación y los 25 euros en efectivo que había en el bolso. Su teléfono móvil sufrió desperfectos porque cayó al suelo.
Un día después -añade la fiscal- se acercó a otra mujer que caminaba por la calle Cruceiro Quebrado, cerca del CHUO, para intentar apoderarse del bolso que llevaba bajo el brazo. La mujer cayó al suelo y la presencia de viandantes frustró la sustracción. En esa misma calle, a las 07.05 horas del siguiente día, Juan Carlos G.P. se cruzó con B.B.F., quien iba acompañada por su madre y hermana. "Una vez las rebasó se dio la vuelta y con ánimo de obtener un ilícito beneficio tiró fuertemente del bolso que llevaba B. pero no llegó a arrebatárselo debido a la resistencia que opuso", relata la fiscal.
El propietario del bar Urgencias salió en ayuda de las mujeres. Ante el forcejeo, se acercó e inmovilizó al supuesto ladrón al tiempo que alertó a la Policía Nacional, que acudió de inmediato al lugar y procedió a su detención.
La mujer asaltada sufrió un hematoma en el brazo y requirió asistencia médica.
