ACCIDENTE

Herido el piloto de un avión contra incendios que cayó en Castro Caldelas

photo_camera Estado en el que quedó la avioneta siniestrada.

Las ramas de los árboles amortiguaron la caída de la aeronave, que participaba en la extinción de un incendio forestal

602f30694c0e1822d217a3c5bcb5655e_resultEl incendio de mayor extensión registrado ayer en la provincia registró además un accidente aéreo en el que el piloto de una avioneta del dispositivo de lucha contra fuegos forestales de la Xunta resultó herido tras perder el control de la aeronave, por causas desconocidas, y estrellarse contra el suelo.

Los hechos sucedieron en el Concello de Castro Caldelas, pasadas las cuatro de la tarde. El aparato siniestrado, modelo Dromader y procedente de la base de Doade, participaba en las tareas de extinción de un incendio originado en la parroquia de Vilamaior de Caldelas. A falta del resultado de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación, que comenzará el estudio de las causas en las próximas horas, los testigos atribuyen el incidente al fallo del motor del avión. "Vin como a avioneta soltaba a auga e acto seguido vina caer en picado", explicó Suelen Osorio, miembro de Protección Civil del Concello. Según apuntó, en ese momento se encontraba haciendo fotografías a las avionetas "e despois de ver a maniobra vin saír a fumareda entre as árbores". Alertada por la situación "e que a perdín de vista", Osorio llamó al 112.



Dificultad por el terreno

En el lugar de los hechos se presentaron tres patrullas de la Guardia Civil de Castro Caldelas y A Rúa, cuatro bomberos del propio Concello, dos asistentes médicos, que accedieron en helicóptero, y miembros de Protección Civil. Ayudados por los vecinos, conocedores de la zona, pudieron localizar el punto del siniestro, tareas que se prolongaron durante más de una hora, debido a la pronunciada pendiente y a la frondosidad del terreno. Durante las tareas de búsqueda, los agentes de la Guardia Civil establecieron un cordón de seguridad.

Doras horas después del incidente, una ambulancia evacuó al piloto del lugar del siniestro hasta el pueblo de Castro Caldelas, donde un helicóptero medicalizado lo trasladó al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense, donde al cierre de la edición de este periódico permanecía en Observación, pero fuera de peligro. Lo único que trascendió del estado de salud del piloto, P.S.G., andaluz de 34 años, es que presentaba traumatismo torácico cerrado, dolor de espalda y rasguños por todo el cuerpo, así como las marcas del cinturón de seguridad.

Óscar José Castro es uno de los vecinos que ayudó al rescate del herido. Según sus declaraciones, "a á dereita da avioneta pegou nuns bidueiros, xirouna e caiu cara atrás, amortiguada polas árbores". Como medida de prevención, el piloto salió por su propio pie del interior de la cabina "porque podía prender lume, debido a que ía cargado de gasolina, e alí esperou ata que chegaran os servizos de rescate", añade.

Por su parte, la alcaldesa del Concello, Sara Inés Venga, informó de que "agora a zona é moi perigosa, porque hai grandes cantidades de queroseno derramado pola avioneta. Hai que estudar a situación e determinar cal é a forma máis eficaz de retirar os cascallos".



El fuego más extenso del día

El fuego en el que participaba la avioneta quedó controlado a las 19,09 horas. En las tareas de extinción participaron un técnico, cuatro agentes forestales, 14 brigadas, cuatro motobombas, una pala, cinco helicópteros y dos aviones. La estimación de superficie quemada es de 40 hectáreas, convirtiéndose en el más extenso del día de ayer en Ourense.

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