La acumulación de meses sin casi precipitaciones ha empezado a provocar problemas de suministro en puntos de la provincia
La acumulación de varios meses sin prácticamente precipitaciones ha llevado a la Confederación Hidrográfica Miño-Sil a trasladar a los concellos una serie de recomendaciones encaminadas a reducir el consumo del agua de las traídas. En concreto urge ahorrar el suministro "en usos y destinos no prioritarios –riego de jardines y baldeo de calles–, así como la reducción de la presión nocturna en redes urbanas y un refuerzo de los controles del agua captada para el abastecimiento, que puede ver mermada su calidad como consecuencia de los caudales existentes".
Desde la Confederación Hidrográfica reconocen que estos caudales son, en general, "bajos para esta época del año, especialmente en el río Sil en O Barco de Valdeorras, y los ríos Avia en Leiro y Ribadavia, así como los ríos Limia y Caldo". En cuanto a la ciudad de Ourense, se apunta que aunque a día de ayer se seguía captando agua del embalse de Cachamuiña, esto podría cambiar "si sigue sin llover". En total en Ourense se está consumiendo de media 21.800 metros cúbicos al día.
Y es que ya hay varios puntos de la geografía ourensana donde se está notando ese bajón de las reservas hídricas. Es el caso de varias localidades de Bande, como San Fiz, As Maus o Corvelle, "que han tenido que reducir el consumo" para asegurar las necesidades mínimas, según señala el alcalde, Antonio Armada. En las parroquias de Inibó y Cavadoiro, en Celanova, "hay que llevarles agua con el camión cisterna cada poco, por lo menos hasta que vuelva a llover", señala José Luis Ferro, regidor celanovense. Y Francisco García, alcalde de Allariz, reconoce que "xa tivemos que subir dúas veces este mes para reforzar co camión cisterna o fornezo da captación que teñen habitualmente". El Concello de Vilamartín, por su parte, solicitó a la Confederación Hidrográfica la posibilidad de utilizar el agua del río Leira para abastecer a los vecinos de Valdegodos y Arcos. Sus manantiales se agotaron hace meses, obligando al Concello que gobierna Enrique Álvarez a conectar sus traídas con la captación de la capitalidad municipal, Vilamartín, en el arroyo de Cernego.
A su vez, la falta de agua en los manantiales donde beben las reses de las explotaciones del oriente provincial obliga a los ganaderos a buscar otros nuevos o bien a abrevarlos con la traída. En Paraisás (Trives) pidieron al Concello que limpiase los manantiales y abriese otros nuevos.
Meteogalicia apunta que hoy llegan las nubes. Pero las lluvias, que tampoco se prometen abundantes según certificaba ayer la meteoróloga María Souto, "llegarán el jueves –por mañana–, el viernes también habrá alternancia de lluvias y claros. El sábado no están previstas precipitaciones en la provincia de Ourense". En cuanto a las temperaturas, se irán suavizando progresivamente en el segundo tramo de semana. Para hoy, la ciudad manejará mínimas de 0 grados y máximas de 13. En el interior de la provincia, se prevén heladas.
