ASALTO

Un hombre agrede y mete pastillas en la boca a una cuidadora en Boborás

El agresor, que dijo reclamar una deuda, entró en la casa rompiendo un cristal

La Guardia Civil investiga una extraña agresión física a una cuidadora de Boborás, de 54 años, a la que golpearon en la cara y, según pudo saber este periódico, metieron un puñado de pastillas por la boca, obligándole a tragárselas. Los hechos ocurrieron en la noche del pasado miércoles en la localidad de Vecoña de Abaixo (Boborás) y la mujer fue trasladada en ambulancia al CHUO, aunque ayer ya se encontraba en su domicilio restableciéndose de las lesiones.

La víctima se encargaba de los cuidados de un vecino, Darío González, de 73 años, que está enfermo y, al parecer, era contra quien iba el agresor, dado que en el interior de la vivienda gritó varias veces: "Darío, paga o que debes".

La cuidadora está contratada por el septuagenario y todas las noches acude a dormir a su casa. El pasado martes, un hombre llamó a la puerta y cuando la cuidadora se asomó para ver quien era comenzó a gritar: "Darío, paga o que debes". El septuagenario ya descansaba en su habitación y la mujer cerró la puerta y también se acostó, sin sospechar que el presunto agresor regresaría al día siguiente.

En la noche del miércoles ya no tocaron la puerta, según relató el propio Darío González, sino que rompieron el cristal y, a través del agujero, cogieron la llave que estaba en la cerradura por dentro y abrieron.

La cuidadora y el dueño del inmueble ya estaban descansando, pero se levantaron sobresaltados. La mujer bajó las escaleras y se encontró con un hombre en la parte baja, que comenzó a golpearla en la cara al tiempo que la agarró y le metió las pastillas que llevaba en la mano por la boca, cerrándosela acto seguido para que se las tragara, acto que duró cerca de cinco minutos. Acto seguido, el agresor abandonó el inmueble reclamando un supuesto pago a Darío, que no llegó a salir de su habitación, ni a pegar ojo en toda la noche. La mujer alertó a la Guardia Civil, que acudió de inmediato al domicilio, al tiempo que también avisaba a una ambulancia para que la llevara al médico.

La Guardia Civil inspeccionó el inmueble y recaba información con el objetivo de identificar al hombre, que según los datos aportados hablaba con acento suramericano, era alto y actuó con la cara tapada.

“SOLO DEBO 50 EUROS A UNA CUIDADORA QUE TUVE ANTES"

Darío González aseguraba ayer estar atemorizado, igual que su cuidadora, al tiempo que recalcaba que no debe ningún dinero a nadie. "La única deuda que tengo es de 50 euros, que tengo que pagar a una cuidadora que tuve antes de ésta. Eso es lo único que debo", explicó. Asegura no entender por qué entraron en su casa reclamando una deuda y menos por qué agredieron a su trabajadora, "que en todo caso no tendría culpa de nada". El septuagenario extremó las medidas de seguridad . 

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