El año se cerró con 87,9 millones de euros, pero solo el Estado había presupuestado 505 millones
La inversión en obra pública en el 2017 ha levantado el vuelo en relación a los números del año anterior pero está lejos de los ejercicios de las grandes obras y a años luz de las promesas reflejadas en los presupuestos comprometidos por las diferentes administraciones. El 2017 se cerró con 87,9 millones de euros de licitación, según el dato adelantado ayer por la patronal española de la construcción.
Esto significa un crecimiento del 32% en relación a los 54,5 millones que salieron a adjudicación en el 2016. Esta cantidad deja dos lecturas en el histórico de inversiones provinciales en los últimos años. Por una parte, supera con creces los años negros de la inversión, que fueron los ejercicios de 2014 y 2015 —con 38 millones en cada uno— y, por otra, dista mucho de alcanzar los 790 millones del 2011 y los 1.025 de la anualidad siguiente.
Pese al repunte del 2017 en relación al año anterior, llegar a la cifra anunciada por los gobiernos se ha revelado como un espejismo. El Estado aprobó sus Presupuestos en abril anunciando una inversión de 505 millones de euros para Ourense, a sabiendas de que solo tendría seis meses para ejecutarlos porque las cuentas fueron de aplicación a partir de junio. De los 505 millones, 465 millones eran para la alta velocidad ferroviaria. Pues bien, según los datos de la licitación oficial el Gobierno central se quedó en 38,1 millones de euros; es decir, con un 7,5% de su propio objetivo. Y eso que uno de los compromisos más reiterados son las obras del AVE, que deberían de movilizar el año pasado 465 millones de euros para cumplir con el plazo de llegada en el 2019.
En cuanto al reparto de partidas inversoras, el Estado es la administración que ha puesto en circulación más obra para licitar, aunque lejos de lo comprometido. De los 87,9 millones que salieron a concurso público en el ejercicio pasado, 38,1 millones eran de esta administración. En cuanto a la Xunta, el dinero aportado fue de 34,7 millones, mientras que la administración local se ocupó de 15,1 millones de euros.
Comparativa
Por lo que se refiere a la comparación con el resto de provincias, Ourense supera por poco a Lugo, que se quedó en esta ocasión con 85,5 millones. Para Pontevedra se han ido 204,5 millones y A Coruña lidera de nuevo la clasificación, con 240,7 millones de euros. Al margen del reparto gallego, Ourense vuelve a situarse en el grupo de provincias con menos inversión pública. Por debajo de la cantidad asignada en el 2017 se sitúan Granada, Jaen, Teruel, Palencia, Segovia, Valladolid o Zamora, entre otras.
