SUCESO

Fallece en una vía de servicio de la N-525 en Rabo de Galo

La Policía sospechó inicialmente de una muerte violenta y que un conductor abandonara el cuerpo

La petición de auxilio de un conductor a las 20,30 horas del viernes, solicitando personal sanitario al 061 para atender a un hombre, que resultó ser Manuel R.F., de 54 años, en una vía de servicio de la carretera N-525, a su paso por Rabo de Galo-Couto Berredo, en la ciudad, disparó la alarma en la Comisaría ante la sospecha de que se tratase de una muerte violenta.

Una ambulancia de Urgencias Médicas acudió de inmediato al lugar pero los sanitarios no pudieron hacer nada por reanimar al hombre, certificando su fallecimiento. También acudieron varias patrullas del Cuerpo Nacional de Policía, que comprobaron que el fallecido estaba indocumentado (inicialmente barajaron la hipótesis de que podría ser oriundo del Cáucaso) y que el cadáver no presentaba síntomas de violencia. 

Los agentes y personal sanitario se interesaron por el conductor que había solicitado el auxilio, pero comprobaron que ya habían abandonado el lugar en un coche de color rojo, al que nadie había anotado la matrícula.

Las autoridades judiciales ordenaron el levantamiento del cadáver para trasladarlo al CHUO y realizar la autopsia. Mientras, los policías iniciaban una búsqueda del conductor, que resultó ser un hostelero de la avenida de la ciudad, cuyo testimonio, junto con el de varios testigos del óbito, desvaneció la hipótesis de la muerte violenta. Es más, permitió identificar al fallecido como Manuel R.F., más conocido por el sobrenombre de Susiño, que, según fuentes policiales, tenía graves problemas con el alcohol y, además, sufría ataques  de epilepsia. 

A Manuel R.F. le dio uno de los ataques cuando viajaba en su vehículo a la altura de la citada vía de servicio, causándole la muerte.

El fallecido, al parecer no tenía familia directa en la ciudad, y los agentes del Cuerpo Nacional de Policía, según pudo saber este periódico, intentaban localizar a un hijo que tiene residiendo en Vigo para que se hiciera cargo del cadáver y de organizar el entierro. 

Muertos en Baños de Molgas y Manzaneda

Un vecino de Cernado (Manzaneda), Marino G.A., de 84 años, también fue localizado  muerto a las 20.00 horas del viernes en un paraje conocido como As Forcadas, dentro del mismo municipio. El octogenario había salido horas antes de casa a pastorear el ganado a una finca de su propiedad en los alrededores del domicilio. La tardanza en regresar alarmó la familia que al ir a buscarlo lo encontró muerto. Su cuerpo no presentaba signos de violencia y las primeras hipótesis apunta a que el óbito fue por causas naturales.

Prácticamente a la misma hora, en la localidad de Meamán (Baños de Molgas) era localizado el cuerpo sin vida de otro octogenario, Jovito G.G., de 81 años. El cadáver esta en los alrededores de su domicilio y las autoridades judiciales lo trasladaron el CHUO para realizar la autopsia.

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