Partidos de la oposición y ecologistas también rechazan la idea que Medio Rural tiene en estudio
La idea de la Consellería de Medio Rural de usar pulseras para tener localizados a los incendiarios -avanzada la semana pasada por el secretario xeral de Montes, Tomás Fernández-Couto en una entrevista con La Región- han provocado un amplio rechazo entre la judicatura, la oposición política y ambientalistas consultados por este periódico. "Non é necesaria", dijo la fiscal de Medio Ambiente de Ourense, Carmen Eiró. "É excesiva", valoró la vicedecana de los Procuradores, Ana María López. "É inviable", zanjó la decana del Colexio de Avogados de Ourense, Pilar López-Guerrero.
Fuentes de la consellería indicaron ayer que la propuesta está en fase "incipiente" y "siendo analizada por el departamento jurídico". La idea expresada por Tomás Fernández-Couto no llegó a estar sobre la mesa del comité policial de vigilancia del monte que se reunió el martes en Ourense, según confirmó el subdelegado del Gobierno, Roberto Castro, quien opina que "todas as achegas hai que miralas en positivo, está aí e haberá que estudala".
Desde el Comité de Defensa do Monte, Xosé Santos -también vocal del Consello Forestal por los grupos ambientalistas- señaló que "o problema non está nas medidas represivas, o incendio forestal xa figura como delito no Código Penal. Pero, onde están os incendiarios? cantas condenas hai?".
"Todos temos que axudar a combater os lumes, e a do secretario de Montes é unha opinión respectable, pero creo que cada un debería actuar na súa parcela", dice Carmen Eiró, que recuerda que en el Código Penal "xa existen mecanismos suficientes para actuar contra os incendiarios". López-Guerrero va más lejos y señala que en la reciente reforma del Código ya quedaron definidos los delitos que pueden ser objeto de libertad vigilada "e para os de incendio forestal non é de aplicación". "Non hai que buscar respostas nas leis", aconseja la decana de los abogados, "hai que ver outras partes do problema". Y en el mismo planteamiento abunda, Ana María López: "Sempre se buscan solución cando xa se cometeu o delito. Hai outras medidas antes que esta. Traballos para a comunidade, por exemplo. Son máis partidaria da prevención. E desde logo non se poden equiparar incendios e violencia de xénero".
También la oposición política censura la propuesta de Tomás Fernández-Couto. "É a mesma estratexia de todos os anos. Un ano foron os globos, ao seguinte os drons, agora as pulseiras... do único que se trata é de desviar atención do problema: que dependemos do clima para que o monte non arda", dice el parlamentario autonómico socialista Pablo García.
Desde el BNG, la parlamentaria por Ourense, Tereixa Paz, ve idéntico propósito político: "Cando o país está en situación crítica, como pasou fai 15 días en Ourense, empezan as ocurrencias do secretario xeral de Montes. Que se deixe de ocurrencias e fale das causas estruturais das vagas de lumes".
Tereixa Paz y Pablo García reconocen que hay actividad incendiaria, pero apuntan a otras líneas de acción contra los incendios: ordenación del territorio, prevención, apoyo a los concellos y mejora de la eficacia policial.
