La Audiencia estimó que solo se hicieron trabajos de seguridad tras hallar restos arqueológicos
La Audiencia Provincial estimó un recurso de apelación, presentado por el propietario de un solar de la calle Progreso donde fueron descubiertos restos romanos mientras se procedía a la demolición del edificio que lo ocupaba, contra la sentencia del Juzgado de Instrucción Número Uno que tipificó como falta por desobediencia la continuación de los trabajos pese a la orden del Concello de paralizar la obra a expensas de la elaboración de un informe arqueológico.
Estos restos, una basa y dos fragmentos de columnas hallados en diciembre del pasado año, se ubican en una parcela correspondiente, parcialmente, al área de reparto incluida en el Bien de Interese Cultural (BIC) de As Burgas, razón por la que el Concello decidió interrumpir la obra.
La Audiencia Provincial especifica en que los trabajos realizados después de remitirse la orden municipal estaban destinados "a salvaguardar la seguridad de la obra", razón por la que decidió decretar la libre absolución del propietario de la falta de desobediencia que se le imputaba previamente, que lo condenaba a una pena de 25 días multa a razón de seis euros diarios.
Este fallo fue valorado positivamente por el apelante, que defendió su inocencia y explicó que las obras fueron paralizadas "en cuanto se recibió la orden", y solo se llevaron a cabo "los trabajos indispensables para garantizar la seguridad de las personas, especialmente los viandantes, y edificios colindantes". El propietario ha recordado que los trabajos de demolición del inmueble "están concluidos a día de hoy y han sido supervisados por una arqueóloga hasta su finalización".
