Junto a la supresión de 36 pasos a nivel, permitirá acortar el viaje entre Ourense y la capital lucense
Los 120 kilómetros de trazado que unen por ferrocarril las ciudades de Ourense y Lugo serán objeto de una importante modernización en los próximos meses. A la anunciada supresión de 36 pasos a nivel –dos de ellos en la ciudad–, se le une la electrificación de los setenta kilómetros que median entre Monforte y Lugo, dando así continuidad a la catenaria que ya existe entre Vigo y Monforte desde hace casi cuatro décadas.
En total, las licitaciones aprobadas por el administrador de las infraestructuras ferroviarias suman 4,7 millones de euros, de los que, aproximadamente, casi dos millones serán destinados a los proyectos para la instalación de la catenaria. En el proyecto destinado a la electrificación también será necesaria la realización de diferentes proyectos constructivos, encaminados a resolver cuestiones como los gálibos en túneles, la instalación de subestaciones eléctricas, acometidas a las líneas de alimentación y actualización de los sistemas de seguridad y comunicaciones.
El plazo de ejecución de los proyectos de electrificación será de doce meses y el importe en el que derivarán las obras estarán en torno a los 83 millones de euros.
Acortar tiempos y ave
Ambas actuaciones permitirán acortar los tiempos de viaje para los trenes que conectan Ourense y Lugo. Además, otro de los beneficios que aportará la electrificación es la posibilidad de que los trenes AVE tipo AVRIL, de rodadura desplazable y bitensión, circulen hasta Lugo, aunque lo hagan desde Taboadela por vías de ancho ibérico una vez pasado el cambiador que se emplazará en dicha estación. Estos trenes estarán disponibles para cuando las obras del AVE hayan concluido de manera definitiva hasta Taboadela y de forma provisional desde ahí hasta la estación de Ourense Empalme mediante la implantación de un tercer carril y la electrificación del último tramo de la línea convencional, en tanto no se substancia la variante exterior.
