Se ha podido recolectar dos contenedores de 60 litros con jeringuillas y basura, pero no se ha podido despejar todo "por no contar con los medios suficientes"
Dos semanas han pasado desde que los "picaderos" de droga localizados en el corazón del casco histórico salieran a la luz.
La Concellería de Saúde se interesó ayer por la limpieza del ubicado tras la antigua prisión de Progreso ante los técnicos de la Asociación de Usuarios, Exusuarios y Técnicos de Droga (Asut) después de la información publicada por La Región, y recibió por respuesta que los trabajos de acondicionamiento estaba siendo iniciados en ese momento.
Aunque la asociación ha podido recolectar dos contenedores de 60 litros con jeringuillas y basura de los terrenos públicos, no ha podido despejar todos los desperdicios "por no contar con los medios suficientes".
Para llevar a cabo una recogida total de los residuos, la Asut ya planteó este año una ampliación del actual Programa Recolle a la Diputación y a la Consellería de Benestar. La intención de la asociación es crear un hábito de trabajo en los toxicómanos y, de paso, efectuar una limpieza total de las zonas afectadas. De momento, la iniciativa está en fase de estudio.
Por otro lado, un informe policial que recoge más de una decena de quejas vecinales y la ubicación de seis picaderos ha llegado esta semana a manos del alcalde de Ourense, Agustín Fernández. El documento, también incluye fotografías de los puntos clandestinos de inserción.
En este sentido, Víctor Fernández, de la Asut, ha incidido en que de los seis picaderos recogidos, "sólo el de Hernán Cortés (tapiado hace dos semanas) estaba en activo". Al menos otros dos"fueron ya cerrados hace más de un año".
