La jornada de puertas abiertas celebrada en el parque de bomberos demuestra que cuando los pequeños conocen a los efectivos de emergencias, quieren ser como ellos
"Mamá, ¡quiero ser bombero!". Y Policía. Y Guardia Civil. Y héroe. Porque sí, cuando los más pequeños conocen a los verdaderos héroes ciudadanos, quieren ser como ellos.
Demostrado quedó en la jornada de puertas abiertas que tuvo lugar ayer en el Parque de Bombeiros de Ourense, en el Campo da Feira. Con motivo de la festividad de su patrón, San Xoán de Deus, estuvieron presentes todos los servicios de emergencias de la ciudad junto al Servicio de Extinción de Incendios: 061, Guardia Civil, Policía Local, Autonómica y Nacional y Protección Civil.
Durante toda la mañana, las familias acudieron a observar de cerca las instalaciones y el servicio de los efectivos. Consejos sobre prevención de incendios, accidentes o cómo actuar en caso de emergencias, fueron algunos de los temas tratados durante la jornada.
Como no podía ser de otra forma en estos eventos, son los pequeños de la casa los que más disfrutan. Las colas para subirse al asiento de conductor del camión de bomberos lo confirman. Casi sin fuerza para cerrar las puertas del vehículo y con los pies colgando, los niños no cambiaron la cara de felicidad en todo el recorrido.
Probar los trajes ignífugos de los Bomberos fue una de las actividades que más gustó a los cativos. Casi tanto como decir "¡Alto!" desde el megáfono de un coche policial, con permiso y gusto del agente de turno.
Porque si los niños son los primeros en disfrutar, los efectivos de emergencias de la ciudad son los segundos. La predisposición y la sonrisa amable enseñando cada parte de su trabajo, les delatan.
