La mayoría de los indicadores de consumo en la provincia están en positivo, pero la tasa de paro y actividad son un lastre
Hasta ocho indicadores económicos de la provincia inducen a pensar que en el primer tramo de este año la situación económica de la provincia está siendo menos turbulenta, incluso llegando a tasas positivas, sin embargo su reflejo en la creación de empleo no es el apetecido porque no presenta síntomas de estabilización. Al menos a esa conclusión se llega con el cruce estadístico de los citados indicadores y la foto fija laboral.
La Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre de este año ha sido un borrón en la hoja de ruta de la recuperación: 1.700 parados más entre enero y marzo (500 más en relación al mismo periodo del 2016). A esto se asocian otros síntomas de debilidad estructural: Ourense se perpetúa con la tasa de paro más alta de Galicia y, a su vez, con la tasa de actividad más baja de España.
Ese escenario estadístico dibujaría a la provincia como un erial, pero eso no es lo que dice el Ministerio de Hacienda, que recauda cada vez más, ya no solo por una eventual mejora en sus servicios de inspección, sino porque los tributos que gravan el consumo así lo demuestran. Entre enero y marzo de este año los ourensanos han pagado ya 113 millones de euros en impuestos, frente a los 104,5 millones del mismo periodo del año pasado. Es decir, un 8,2% más. La recaudación por el IVA, directamente relacionado con la adquisición de bienes y servicios, ha crecido en el mismo periodo un 20,4%, al pasar de 45,4 millones de euros a 54,8 millones.
La venta de viviendas, lejos aún de su mejor momento, también crece. El INE certifica que en los dos primeros meses se han vendido 269 viviendas frente a las 227 del pasado año, con un 15,7% de incremento. Y, como consecuencia de este dato, la concesión de hipotecas también se ha contagiado ya que según el citado organismo entre enero y febrero de este ejercicio se formalizaron 153 hipotecas sobre viviendas, frente a las 122 del año anterior, arrojando una tasa positiva del 20,3%.
Las empresas
Y si el dinero fluye, el reflejo se mide en termómetros como la venta de coches. Entre enero y marzo las matriculaciones de coches han crecido, pero de forma más tenue. La patronal reconoce un incremento del 0,43%, pero las operaciones hechas sobre flotas vendidas a empresas ourensanas ha crecido un 9%, lo que revela que estas firmas están invirtiendo en la mejora de sus dotaciones.
También la estadística que refleja algunos movimientos empresariales es positiva, como las exportaciones. Las compañías ourensanas han roto la timidez de ganar mercado en el exterior y en enero y febrero de este año se hicieron operaciones por valor de 126,4 millones de euros, frente a los 121,2 del pasado año, lo que revela un incremento del 4,2%.
Las propias empresas parecen tenemos menos ahogos en la actualidad porque el número de sociedades mercantiles ourensanas que han tenido que acogerse a concurso de acreedores ha caído un 86%.
Por su parte, las instituciones públicas han mejorado levemente la licitación de obra pública, si bien el nivel de inversión es todavía muy bajo. En los dos primeros meses de este año salieron al mercado obras por valor de 9,7 millones de euros sobre los 3,1 registrados el año pasado, con lo que el incremento ha sido del 61,8% n
