El embalse sobre el Loña, que tradicionalmente abastece la ciudad, solo tiene ya el caudal ecológico
El Concello de Ourense anunció ayer que la ciudad empezará a abastecerse exclusivamente de agua del Miño a partir de hoy, a la espera de que las lluvias permitan recurrir a los embalses después del verano. "Coa chegada dos meses de calor baixan os niveis de auga do río Loña no encoro de Castadón, do que tamén se canaliza a auga o resto do ano, e o Concello vese obrigado a garantir e preservar o seu caudal ecolóxico durante os 365 días", informó ayer el gobierno municipal en una nota de prensa para justificar una decisión que se adelanta en dos semanas respecto a lo que venía siendo habitual en los últimos años.
Este embalse de Castadón, donde se halla el grueso de la canalización que se deriva después a los depósitos de agua potables, se abastece precisamente de Cachamuiña, la "fuente" de esta pequeña presa y que ya ha agotado su capacidad de agua.
Ya se había recurrido al Miño en ocasiones puntuales pero a partir de hoy el bombeo que garantiza el abastecimiento a los ciudadanos de la capital será solo del Miño. La sequía estival, que este año se ha adelantado, provocó que la caída de caudal del Loña también se acentuase.
Hay que tener en cuenta que entre octubre y julio, el nivel de precipitaciones en la ciudad y su entorno está por debajo -entorno a un 25%- de los valores medios registrados en los últimos treinta años, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Además, el pasado mes fue el julio fue más caluroso desde el año 2000, por detrás de julio de 2013. En estas condiciones, los embalses de Cachamuíña, en Pereiro de Aguiar, y de Castadón, que suministran el agua a la ciudad, han alcanzado el caudal ecológico mínimo que establece la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil varias semanas antes de lo que venía siendo habitual.
Por su parte, Viaqua -la empresa que presta el servicio de aguas- subraya que el cambio de fuente de abastecimiento no supondrá ninguna merma ni en la presión ni en la calidad del agua porque la capacidad del Miño es elevada.
La compañía de abastecimiento avanza que el suministro desde Castadón volverá a retomarse en cuanto el agua del embalse -que a su vez se surte del pantano de Cachamuíña- recupere los estándares de calidad adecuados; normalmente eso no ocurre hasta pasado noviembre si las lluvias del otoño son suficientes, lo que este año podría retrasar esa captación ya que las previsiones parecen augurar un otoño también seco y suave.
