VITICULTURA

La misión acabó a pie de bodega

La sexta edición de Vinis Terrae finalizó ayer con una visita ofrecida a la misión de importadores por la organización, en colaboración con los consellos reguladores, a algunas de las bodegas de Monterrei y Ribeiro. 

Los cerca de 100 importadores del sector vitivinícola procedentes de 20 países que se dieron cita durante el lunes y martes pasado en Vinis Terrae, disfrutaron de un interesante colofón, ofrecido por los organizadores del salón en colaboración con las bodegas, y que les permitió conocer de primera mano la labor que se desarrolla en algunas de ellas en las denominaciones de origen de Monterrei y del Ribeiro.

Los compradores procedentes de Estados Unidos, Perú, México, Reino Unido, Polonia, Australia o Canadá, entre otros países, conocieron de primera mano los vinos, bodegas, viñedos y gentes de cinco de las bodegas de la Denominación Ribeiro para poder valorar los vinos ya probados previamente en el Salón en su entorno propio, los viñedos y bodegas que lo elaboran y todo ello explicado por sus bodegueros y enólogos.

Previamente, en la tarde del martes, estuvieron en Monterrei, donde conocieron los Lagares Rupestres de Vilar, en Vilaza, y la bodega Castro de Lobarzán, que les fue mostrada por su propietario, José Fernández Feijóo.

“Los caldos de Galicia son muy competitivos”

José Ignacio y nydia Flores son representantes de Jerry’s distribution y Trisstar Company e importadores en Texas de la empresa Go Galicia Worlwide Business SL. Forman parte de los cerca de 100 compradores procedentes de 20 países que visitaron la última edición de vinis Terrae y prolongan su estancia en tierras gallegas durante lo que resta de semana para cerrar el mayor número de líneas de negocio con las bodegas de la provincia.

"Nosotros trabajamos en el mercado americano, que está cada vez más interesado en los caldos procedentes de españa y, en concreto, de Galicia", señala Nydia Flores.

A lo largo de dos intensas jornadas han podido paladear va- riedad de caldos y no dudan en describirlos como "excelentes", al tiempo que destacan que "tanto el albariño, como el godello o la treixadura se adaptan muy bien a nuestros pescados y mariscos", explica José Ignacio Flores. Un maridaje que no distingue de denominaciones "porque todas tienen sus características destacadas y propias, siempre ofreciendo vinos frescos, aromáticos y muy agradables en boca", señala Nydia.

Otro de los factores que destacan estos importadores texanos es que "los vinos de las denominaciones de origen gallegas son muy competitivos en su relación entre calidad y precio" .

"Los vinos gallegos son de una calidad muy elevada"

Nerio Ruiz es un comprador e importador procedente de Panamá, que compartía ayer, con otros profesionales del sector vitivinícola invitados a Vinis Terrae, la visita organizada a varias bodegas de la denominación de Origen ribeiro.

Según destaca, la participación en el salón de expourense y su prolongación en las bodegas de diversas denominaciones le han dado la oportunidad de conocer unos vinos "sabrosos, amigables y de una calidad muy elevada". Resalta especialmente "la posibilidad que se nos ha ofrecido de conocer el trabajo en los propios viñedos", además de las posibilidades de realizar un importante número de catas para conocer el mayor número de bodegas posibles pertenecientes a las cinco denominaciones gallegas -cuatro de ellas en Ourense-.

Ruiz señala que, gracias a este recorrido por los viñedos, "hemos conocido unas producciones familiares y que trabajan en producciones muy cuidadas, elaboradas al detalle y de muy alta calidad", que es lo que demanda en estos momentos el mercado panameño.

Panamá importa en la actualidad mucho vino procedente de países limítrofes y también de estados unidos, "pero cada vez hay más interés por los vinos españoles e italianos, y muy especialmente por los primeros". Dentro de este creciente interés por el vino español, los caldos gallegos ocupan un lugar relevante.

Te puede interesar